El club de los viernes. Kate Jacobs

Publicado el 19 abril 2012 por Matilda @Matildalibros


   He tenido bastantes problemasúltimamente con blogger y no conseguía actualizar ni comentar, nimis blogs, ni los de los demás. Poco a poco vamos poniéndonos aldía y hoy traigo un libro de esos de sofá y mantita, fácil deleer, agradable, lleno de personajes entrañables...
   Ya os conté que, desde hace unosmeses, me he aficionado a eso de trastear con las lanas. Aprendí ahacer ganchillo y ahora ando peleando con el punto del derecho y delrevés en las dos agujas. ¡Una nueva afición que me tiene de lo másentretenida y motivada!

   Ante este panorama y con El club delos viernes rondando por casa de mis padres, me pareció que eramuy buen momento para sumergirme en él.
   Sé que este libro no es una novedad,de hecho, hace tiempo que se lo regalé a mi madre pero, me habíancomentado que era de esos de llorar y no me animaba. Además, cuandoun libro me hace llorar me da coraje porque con las lágrimas no veoy no puedo seguir leyendo.
   En fin, el caso es que dejé el libropara más adelante y me dediqué a otros, ya sabéis cómo es lalista infinita pero hace poco, una bloguera ganchillera me lorecomendó y pensé “igual es buen momento”. Y como mi madre medijo que a ella le había gustado me decidí.

   La historia es sencilla. GeorgiaWalker es la dueña de una tienda de lanas que está situada en plenoManhattan, es soltera y tiene una hija adolescente que estádescubriendo su pasión por la cocina. Su tienda de lanas tiene ungrupo de tejedoras que se reúnen los viernes para tricotar un rato,comentar sus cosas y ayudarse en sus labores. Cada una ha llegadoallí por una razón y cada una tiene sus secretos, sus temores y suspeculiaridades pero poco a poco irán haciéndose amigas ycompartiendo algo más que las tardes de los viernes. Ya veis, seresume pronto, pero claro, lo más interesante es todo lo que no oscuento, como que a la vida de Georgia van a regresar personas a lasque creía tener más que olvidadas o que en el grupo cada mujer seirá descubriendo a sí misma, sus deseos y sus ilusiones al tiempoque cuenta puntos.
   Esta es una de esas novelas que, engeneral, te dejan con buen sabor de boca, es muy fácil de leer yaque mantiene un ritmo ágil y ligero y cada personaje te atrapa a sumanera, manteniendo la intriga y deseando que encuentren lo quebuscan. No es una historia con grandes pretensiones, creo que soloquiere ser agradable y cálida y la verdad es que con tanta lana portodas partes, lo consigue. Una tienda de lanas es un sitio acogedor ymaravilloso y creo que, como las librerías o las tiendas de té,existen para que podamos refugiarnos.

   Quizás hayáis oído comentariossobre su final, es cierto que es un poco chocante pero, como el restodel libro, es positivo y trata el dolor como lo que es, un viejocompañero de viaje con el que debemos aprender a convivir.
   En fin, que si no lo habéis leído,yo os lo recomiendo, se lee rápido puede ser un buen descanso enesas listas de pendientes que todos tenemos y que a veces son un pocodensas.
   Aprovecho esta entrada para enseñarosuna de mis creaciones, ¡mi primer chal! Y os lo quiero enseñar porvarios motivos. Primero, porque me apunté a una especie de laborconjunta (sí, como las lecturas pero con labores), pero como aúnsoy bastante inexperta no conseguí entender el patrón como para queel chal en cuestión me quedara bonito. Después de pasar una semanahaciendo y deshaciendo decidí quitarme la espinita buscando unpatrón bien explicado de otro modelo porque, bueno, hay que ir concalma pero, ¡yo hacía un chal como que me llamo María!

   Además, es la primera prenda quehago, me quedo y puedo usar, vamos, lo primero que hago para mí, todo lo demás han sido regalos. Mehice un jersey pero, como buena novata usé el modelo “demasiadopequeño” y me resulta bastante incomodo.
   Así que, aquí lo tenéis, aún mequeda mucho por aprender pero a mí me parece que ha quedado bastante bien.

   Y después de enseñaros un poquitomás de mí y recomendaros un libro entretenido os dejotranquilos. Gracias, como siempre, por el apoyo y la compañía.
   Un abrazo a todos y nos leemos.