El Coche de barrio ya circula por las calles de Madrid

Por Albert Cañigueral @AlbertCanig

El pasado martes 10 de junio tuvo lugar en Madrid la presentación del proyecto “Coche de barrio”, una iniciativa que promete revolucionar la movilidad urbana de la ciudad con el apoyo de una comunidad activa de ciudadanos. Se espera que en próximos meses se replique la idea en otras ciudades de la península, muy posiblemente comenzando por Sevilla, la segunda capital donde Bluemove ya tiene presencia.

 Cerca de 100 personas acreditadas y otros muchos curiosos que caminaban cerca del Templo de Debod asistieron a la presentación oficial de “Coche de barrio”, una herramienta pionera de innovación social positiva que la comunidad de Bluemove junto a Kia y el equipo de Consumo Colaborativo han conseguido poner en marcha inicialmente en la ciudad de Madrid.

 La clave de este proyecto pionero es transformar lo que antes era un problema en las ciudades, el coche, en una solución, dando prioridad al uso frente a la propiedad de un vehículo. “Coche de barrio” ofrece un servicio que hace innecesario a los ciudadanos el tener que adquirir un vehículo en muchos casos, suponiendo no sólo un gran ahorro para el propietario, sino reduciendo además el impacto que suponen en las ciudades, donde estos permanecen estacionados el 90% del tiempo. Como decimos en Consumo Colaborativo, aquello que no se utiliza se convierte en basura.

Durante el evento, Jorge González Iglesias, CEO cofundador de Bluemove, explicó la tecnología del Coche de barrio y el funcionamiento del servicio. Se trata de[1] [2]  un vehículo moderno, de bajas emisiones, que se adquiere mediante una fórmula muy accesible de contrato renting, con cuotas mensuales personalizadas a cada conector que oscilan entre los 50 y 150 euros al mes. La persona que adquiere este contrato se transforma en “un vecino conector”, consiguiendo unas ventajosas condiciones para disponer de un vehículo liberándose de todos los gastos añadidos a la propiedad (mantenimiento, seguros, reparaciones, impuestos, etc.), teniendo sólo que preocuparse de utilizarlo cuando considera que lo necesita. A cambio de disponer del acceso a un vehículo con estas ventajosas condiciones, el conector con el apoyo de Bluemove tendrá que ayudar a generar comunidad en torno a su coche (con amigos y vecinos del barrio)  y compartirlo con ellos para que puedan usarlo

El consumo colaborativo está desarrollando los modelos de movilidad del futuro

Coche de Barrio es un viaje al futuro. ¿Cómo nos imaginamos la movilidad en las ciudades del año 2050?  Imaginamos ciudadanos que utilizan diferentes medios de transporte urbanos, compartidos y distribuidos por la ciudad, imaginamos una aplicación que te dirá en ese momento las opciones que tienes para desplazarte al lugar que quieras ir. Si quieres desplazarte por el centro de la ciudad tendrás varias opciones:

a) Coger un vehículo compartido y que este más cercano a ti, y pagar solo por su uso

b) Compartir un trayecto con otros ciudadanos que están haciendo un recorrido igual o similar al tuyo.

c) También podrás seguir optando por los transportes públicos, la aplicación te dirá exactamente  a qué hora pasará tu autobús o tren y te dirá lo que tardas a tu destino, conexiones…

En definitiva una red de vehículos compartidos  (públicos y privado-compartidos), que se mueven por la ciudad y que va mutando en función de las demandas de movilidad que surjan cada día. Escenas de ciudades invadidas por coches tanto parados, como en circulación en atascos será una estampa del pasado.

Shareable Cities: ciudadanos, administración y empresas que apuestan por ciudades más sostenibles, más sociales y en definitiva más habitables.

La economía colaborativa se puede ver, como cualquier cambio o innovación disruptiva, de dos maneras, como una amenaza o como una oportunidad. ¿Cómo es posible que una empresa que fabrica  y vende coches como es KIA vea una oportunidad en los coches de barrio y no una amenaza?, ¿cómo es posible que apoye un modelo de movilidad que reduce, a priori, la venta de coches?… muy sencillo, porque es consciente, con las cifras de la evolución del mercado de carsharing en el mundo, que esto es imparable, y que más vale adaptarse cuanto antes al futuro, y que por mucho que las empresas se empeñen en vender lo de siempre y como siempre, la sociedad, las personas y el consumo están cambiando. KIA entiende que tiene que vender movilidad no tanto coches.

Alfonso Ozores, representante de Kia Motors Iberia, destacó durante el evento el gran interés de la compañía automovilística en colaborar con Bluemove para dar un paso juntos hacia nuevas fórmulas que transformen el concepto del uso del coche. Kia facilitará a lo largo de la estrategia de consolidación del proyecto de “Coche de barrio” una flota de 140 vehículos que esperan movilicen a muchos ciudadanos.

¿Es posible que iniciativas como Coche de barrio y otras de la economía colaborativa sean apoyadas por las administraciones públicas?, ¿es posible pensar en ciudades más eficientes , más sostenibles, y más sociales por el hecho de compartir y reutilizar recursos?, ¿puede la política ser independiente de las presiones de los lobbys que defienden la supremacía y solo los intereses de los negocios tradicionales? De nuevo encontramos ejemplos que nos muestran que es posible en diferentes alcaldes y ciudades que ya están apostando por el modelo colaborativo. Holanda en Europa, San Francisco en USA y Seúl en Asia. ¿Madrid?.

De empresas productoras de bienes y servicios a empresas facilitadoras

A partir de este momento el papel de Bluemove será facilitar lo necesario a la comunidad de “vecinos conectores” y resto de usuarios para que puedan compartir el Coche de Barrio. El objetivo es que se convierta en una herramienta social que ayude a cubrir necesidades entre vecinos de manera más satisfactoria que si cada uno hiciera un uso individual del propio vehículo.

Durante el primer mes 40 personas se han convertido ya en “vecinos conectores” que en breve pondrán a disponibilidad de varios barrios de madrid sus coches y existe ya una lista de 200 personas interesadas en convertirse en conectores.

Sin duda el acceso o el uso a un bien o servicio, mas allá de la propiedad y el uso privado, es ya una tendencia social y de consumo que está dibujando los escenarios del futuro-presente.

Un artículo de Carlos G de Juan, autor del blog “hacia rutas del cambio positivo”, Lidia Aroca y Luis Tamayo en colaboración.