El código de los Wooster

Publicado el 17 octubre 2014 por Vetusta

Autor: P.G Wodehouse
Editorial: Versal
ISBN: 8478760539
Nº de páginas: 216
Título original: The Code of the Woosters
Bertie Wooster se levanta con una tremenda resaca de la despedida de soltero de Gussie Fink-Nottle, su amigo amante de los tritones. Aún convaleciente, le manda llamar la temible tía Dahlia para que vaya a un anticuario y desprecie una jarrita de leche en forma de vaca del s.XVIII, a la que su marido coleccionista ha echado el ojo, para desmoralizar al anticuario y que baje el precio. Ni que decir tiene que Bertie fracasa en tan delicada misión y la némesis de su tío, sir Watkyn-Robbins, futuro suegro de Gussie, acaba comprando la jarrita-vaca. Sobra decir que Jeeves y Bertie tendrán que recuperarla por todos los medios a su alcance.
Wodehouse es uno de mis autores comodín. Me refiero con esto a que siempre recurro a él cuando tengo un bajón lector o cuando quiero desintoxicarme de lecturas más profundas. Nunca me falla.
Bertie Wooster y Jeeves son dos personajes maravillosos. Leyendo sobre sus aventuras y desventuras siempre termino de buen humor, con una gran sonrisa en los labios. ¡Y qué mejor terapia que el humor!
En esta ocasión nuestros dos héroes deben llevar a cabo una complicada misión: recuperar por encargo de la tía de Bertie una jarrita- vaca de plata que por azares de la vida el mayor rival de su tío le ha arrebatado a éste.
El problema está en que el señor es cuestión es un viejo conocido de Bertie del que no guarda muy buen recuerdo.
Así que aunque la cuestión parece sencilla a primera vista siempre que Wooster está de por medio la cosa se complica sin remedio.
No sólo deberá salvar el honor de la familia sino que también deberá conseguir que dos jóvenes parejas de amantes logren su propósito de contraer matrimonio.
Todo ello bien sazonado de situaciones absurdas, hilarantes y enredos sin fin en el que Bertie (casi) siempre sale mal parado y el mayordomo Jeeves (hombre inteligente y conocedor de la naturaleza humana) debe acudir al rescate "desfaciendo" el entuerto.
Podemos decir que es un ejemplo perfecto de "cómo orquestar un buen plan y que todo salga terriblemente mal". Ahí está la gracia del libro.
La desesperación de Bertie es tal que produce risa y los personajes que lo rodean, tanto femeninos como masculinos, no tienen desperdicio (no os perdáis la tendencia de tía Dahlia a destrozar todo lo que tiene a mano).
Se trata, pues, de una novela divertida, entretenida al máximo y que se lee del tirón. Absolutamente recomendable para los fans de Wodehouse y para los que todavía no lo hayáis descubierto, sólo una cosa: ¿a qué estáis esperando?