El color del cristal.

Publicado el 21 febrero 2016 por Torrens

Los mismos periodistas que no dan la más mínima importancia a que desde la propia Administración Pública se manipule la Justicia para ocultar y defender a los responsables de estafas como las Preferentes y la salida a Bolsa de Bankia, encima desinforman en temas europeos.

Primero con Angela Merkel, que después de haber actuado como la Führer dictatorial de la U.E. obligándonos, entre otras cosas, a poner en práctica medidas contrapuestas a las que se tenían que haber aplicado para salir de la crisis, mientras ocultaba la pésima situación de la banca alemana a pesar que ella misma se había encargado de librarla del problema griego colocándonoslo a nosotros, ahora resulta que por su actitud de madre amantísima en el tema de los refugiados es la gran líder europea, cuando en realidad, como en casi todo lo que está hundiendo a la U.E., es la principal responsable, porque para países pequeños y de transito como Hungría o Austria es un inmenso riesgo que atraviese el territorio un flujo de inmigrantes que el país no puede absorber, porque si al llegar a su destino no les permiten el paso pasarían a ser su problema exclusivo y la postura alemana no ha sido clara y determinante como para dar garantías a esos países de tránsito. Lo que la Loca de Berlín tenía que haber hecho era aprovechar su poder dictatorial que todavía mantenía al inicio de la crisis de los refugiados para imponer frente al problema un criterio común para toda la U.E., y ahora ella es la heroína y los que se defienden son los villanos.

Otro caso de desinformación es el resultado de la negociación entre la U.E. y el Primer Ministro británico David Camerón. Muchos periodistas culpan a Cameron de haber forzado a la U.E. a una especie de suicidio, cuando hace mucho tiempo que la U.E. no da una a derechas y está aportando a sus miembros muchos más problemas, la mayor parte inútiles, que soluciones.

Los dos aspectos más importantes del acuerdo son la facultad británica de no implementar medidas comunitarias que afecten a su economía y el establecimiento de limitaciones a inmigrantes de la propia U.E. Con respecto a la primera lo explicaré con una pregunta: ¿Qué opinaríais si fueseis británicos, conscientes que el centro financiero de Londres aporta entre un 15 y un 20 % de la riqueza del país, y que personajes como Merkel, y después de la experiencia de los últimos años, puedan actuar a su antojo sobre el mercado de Londres?. Con respecto al tema de los inmigrantes de la U.E. las limitaciones se imponen por los abusos que se han producido desde que la propia Merkel abrió de par en par las puertas de la U.E. a países de la antigua Europa del Este que estaban a años luz de las mínimas condiciones para ingresar en la Unión. El Reino Unido dispone de uno de los más generosos sistemas de Estado del Bienestar de todo el continente, y los abusos de, en especial, polacos y rumanos, han llegado a extremos de limitar los servicios de vivienda municipal a los propios británicos y percibir rentas y subvenciones residiendo el mínimo tiempo legal en el Reino Unido y manteniendo su verdadera residencia en su país de origen.

De todas formas es casi normal que en el país donde la ciudadanía dice estar preocupada por la corrupción para después votar al partido más corrupto, continuamente se estén diciendo estupideces. La última la del PSOE al rechazar la propuesta de Podemos, no solo porque repiten la generalizada demostración de profunda estupidez nacional al rechazar el referéndum en Catalunya, sino porque responden a la propuesta de sustancial aumento del gasto social con el siguiente comentario:

“Parte de la base de que España no tiene ya un déficit de 46.000 millones al año, por lo que el incremento del gasto público sería de más del 50%. Esta medida tendría “efectos desastrosos” para España, haría imposible el equilibrio presupuestario, los objetivos de cumplimiento de reducción del déficit público y pondría “en riesgo” la senda de recuperación económica, entre otros efectos perniciosos”.

Es decir, en primer lugar, para el PSOE no hay manera de reducir el gasto público de la propia Administración, cuando la realidad es que la reforma de la Administración Pública, reduciendo su gasto y aumentando su eficacia, todavía no se ha ni intentado. Solo cerrando varios cementerios de elefantes como el Consejo de Estado y el Senado sería suficiente. Pero además dejan claro que la limitación del déficit público ha de respetarse como si fuese un mandato divino y no de Merkel, cuando ya prácticamente no quedan expertos fuera de la U.E. y el FMI que no responsabilicen a la austeridad a destiempo por la salida de la crisis solo a medias, y en lo referente al paro en España, ni eso. Por lo visto en el PSOE no se han enterado que el propio Banco Central Europeo recomienda ahora aumentar el gasto público y mandar la austeridad a paseo.