Siempre es complejo el inicio de una nueva etapa. Y es complejo porque nos cuesta salir de la zona de confort pero cuando nos animamos, nos damos cuenta que nada sabemos, que esta todo por aprender y cuando aceptamos esto, nos encontramos con que nadie confía en nosotros; ni amigos ni familiares, y cuando logramos que ellos confíen, llegamos a nuestros inversores o principales proveedores o clientes y no creen en nosotros ,se nos ríen, nos dicen cosas como, “esto no es para vos” o “no puedo acompañarte”, “no creo que sea posible”… y cuando logramos que uno de estos confíe, nos encontramos con que no sabemos nada de empresas y alquilar un local o registrar una empresa es bien complicado porque a nadie le interesa asistir a quién recién empieza: muchas preguntas, escasas probabilidades de concretar… Y cuando lo logramos, llegan los primeros empleados y muchas veces estos nos fallan, nos decepcionan, nos exigen tiempo mental que quisiéramos emplear en nuestro proyecto, en lo que nos gusta hacer… y cuando lo entendemos, una crisis externa inesperada, de esas que nadie nos dijo que debíamos proyectar, y cuando la sorteamos, un competidor que hace lo mismo que nosotros pero de mejor forma… y cuando nos damos cuenta, transitamos toda una vida, aprendiendo a sortear obstáculos mientras hacemos lo que más nos gusta, lo que mejor sabemos hacer.
Cuando miramos para atrás todo es orgullo, emoción por haber logrado todo lo que creíamos que era imposible, lo que creíamos que nunca podríamos hacer por nosotros mismos, lo que creíamos que solo podrían hacer quienes nacían para esto…
Emprender es vivir apasionadamente aprendiendo, es transcurrir la vida haciendo lo que uno quiere hacer. Emprender es vivir en un círculo vicioso de miedos, toma de riesgos, aprendizajes, alegría por el logro y nuevamente comienza el ciclo… ¿Quién dijo que tener miedo es malo?.. El miedo es esa sensación que aparece cuando enfrentamos una situación nueva, desconocida, una que nos compromete a desarrollar algún recurso para enfrentarla..
No existe un solo emprendedor que no haya tomado riesgos a lo largo de su camino.
No hay un solo emprendedor que no haya dejado algo de lado para hacer lo que siente que tiene y quiere hacer..
Si lo tienes claro en tu mente, no lo dudes; se puede, no lo dudes; vas a sentir miedo muchas veces, no lo dudes; vas a vivir una vida plena con la sensación de felicidad por arriesgar todo por algo que para ti, vale la pena…
Y al final sentirás que todo es posible, que nada te detiene, que sentir miedos y tomar riesgos es parte de tu día a día, que ya no puedes estar sin sentir esa sensación en tu cuerpo, en tu mente…
Marcelo Dutra
www.marcelodutra.com.ar