El compañero de trabajo ideal

Por Juanmartinezsalinas76

Hace unos meses publicaba en mi blog el post titulado ¿Quién es quién en la empresa? en que comentaba de forma sarcástica que para encontrar perfiles de personas poco recomendables no hace falta irse a Gran Hermano. En muchas empresas también abundan.

En los comentarios, Arkangel comentaba que siempre se tocan en este tipo de clasificaciones los perfiles negativos y me comprometí a tratar en otro post los perfiles de personas buenas y profesionales que existen en las organizaciones. Así que allí voy, eso sí, intentare tratarlo en toque de humor para conseguir arrancaros una sonrisa, algo que siempre que hago este tipo de clasificaciones intento aportar, eso sí, sin ofender a nadie. Son generalizaciones.

El “Generosos Mega Espléndidos”: persona buena por naturaleza, que lo lleva escrito en su cara y que no sabe decir que no a nadie. Siempre está dispuesto a realizar favores a los demás con su mejor intención. Que algún compañero le pide que le ayude a terminar un informe o tarea, pues allí que lo hace aunque no sea competencia suya. Incluso, a pesar de que en alguna ocasión, no le prestase apoyo cuando se lo pidió. Si tienen galletas (snack necesario en toda oficina) no dudan en ofrecer a los demás y sigue llevando a pesar de que le vuelan. Y ratas (los animales, me refiero) no suele haber en las oficina. Para estas personas, un consejo: que abran los ojos de vez en cuando para ver el tipo de personas que tienen al lado. Porque una cosa es ser bueno y otra muy distintas ser……


El “Mega Profesional”: Cuando surgen inconvenientes en sus áreas de trabajo, en vez de encontrar rápidamente culpables para cortarles la cabeza, se dedican a buscar soluciones que ayuden a salir del atolladero. Más adelante, ya se tendrá tiempo de analizar en qué fallé y cómo se puede evitar que vuelva a ocurrir. Es más, creen en las segundas oportunidades y son defensores de la formación de las personas para subsanar sus carencias que conllevan fallos. El aprendizaje conlleva errores porque nadie nace enseñado.


El  “Pequeño Saltamontes” : Siempre dispuestos a escuchar a los demás para que se desahoguen y, tras analizar su mensaje, aconsejarles según su punto de vista, sin entrar a juzgar la situación ni a la persona que se explica. Porque estas personas consideran que para ganar en percepción, uno siempre debe ponerse en el lugar de la otra parte para intentar comprender su punto de vista, independientemente de que lo comparta o no. Creen en las personas por encima de todo.

El “En el trabajo, trabajo, en lo personal, personal”. Podría ser clasificado como una variante del “Mega Profesional”. Suele ser una persona honesta y franca que saben diferenciar el ámbito profesional del personal, es decir, que cuando tienen una diferencia de trabajo con otro compañero por muy en desacuerdo que estén no lleva el tema al terreno personal y rápidamente olvida el tema tras encontrar una solución. De la misma forma estas personas son las primeras que cuando se equivocan lo reconocen, sin ningún problema, dando la razón al que la tenga y ayudando a sacar adelante la idea correcta por el bien común.

El “4×4”: Es un perfil polivalente, que tienen experiencia en diversas áreas corporativas de la compañía y saben tomar el rumbo de los temas de formas excepcional, asesorando al resto del equipo de forma soberbia, sin asumir excesivo protagonismo porque se considera uno más del grupo. Le sale participar y dar su granito de arena porque para él, comprometerse en aquello en lo que esta embarcado lo considera vital, independientemente de que, en más de una ocasión, la otra parte no le corresponda en la misma medida.

El “No problem”: Es paciente, sabe aguantar estoicamente las situaciones de estrés y tensión como nadie, siendo más resolutivos en estos momentos y ayudando a los nerviosos perdido a ver luz al final del túnel. Estas personas están seguras de si mismas y saben que siguiendo paso a paso la situación, irán cerrando adecuadamente los temas. Saben decir las palabras adecuadas en cada momento y son expertos en efectuar las medias correctas en cada momento para encontrar la solución. Si se equivocan, no pasa nada porque esto les hará encontrar otra alternativa que aprenden con el tropiezo. Consideran que la experimentación es necesaria para avanzar.

El “Propone Ideas”: Son personas inquietas. Siempre están pensando en cómo pueden mejorar procesos, procedimientos ya existentes y como implementar nuevas ideas que ayuden a ahorrar costes y poder redistribuir más adecuadamente las tareas entre las personas. A este tipo de profesionales se les debe dejar margen amplio para desarrollar y poner en marcha muchas de sus ideas en horario de trabajo porque es algo que necesitan y que repercutirá positivamente en sus compañías sin ninguna duda.

El “Visionario”: Saben ver los cambios que se van a producir en el mercado o en su sector y que saben hacer los cambios antes que nadie por mucho escepticismo que pueda existir en su entorno de trabajo. Saben ganarse a los demás y hacer que confíen en sus directrices y, para ello, buscará un equipo que sepa gestionar ese nuevo rumbo que debe adquirir la empresa.

El “Invisible”: Suele pasar desapercibido el trabajador incansable, que no hace ruido pero que su trabajo es excelente y gracias a este tipo de personas la empresa funciona bien. Estas personas no tienen aspiraciones de ascenso, no de progresión profesional porque les gusta el trabajo que desempeñan por encima de todo y quieren seguir haciendo esas tareas donde son especialistas. Así que las empresas deben saber percibir esto y escucharles para no obligarles a cambiar de puesto si ellos no quieren. No olvidemos que no todas las personas valen para todos los puestos.


El “Enlace”: Siempre está relacionándose con todas las personas de la organización, intentando conocer sus necesidades y peticiones, para intentar encontrar soluciones antes que eso se conviertan en grandes problemas que no tienen solución por no intervenir en el momento correcto. Estas personas siempre tienen la puerta abierta para todo el mundo y suelen ser ellos los que acudan a los demás.

Por supuesto me dejo muchos perfiles profesionales buenos y necesarios. Por ello os lanzo la siguiente pregunta ¿Cuáles creen que faltan?

De la misma forma, me gustaría aconsejar a esas personas que están perdidas en perfiles no adecuados, que miren más a este tipo de perfiles para aprender qué es lo que se debe de hacer para mejorar esa situación.

Para finalizar, pido a los dirigentes de las compañías que cuiden y valoren más a este tipo de trabajadores porque como suelo decir a veces “uno no valora lo que tiene hasta que deja de tenerlo”