Aparecido en ordenadores hace algo más de un año, El Conde Lucanor nos trae una aventura cargada de exploración, misterio y cierto terror psicológico donde encarnamos a Hans, un niño de 10 años que, cansado de ser pobre y de vivir con su madre a la espera de que su padre se digne a "volver de la guerra", decide abandonar su casa y vivir sus propias aventuras. El juego nos dejó muy buen sabor de boca cuando lo probamos en Windows.
Está escena tan animada luego se convierte en todo un horror
Las cinemáticas cambian de registro gráfico
El juego tiene en cuenta las decisiones que tomemos, además de ofrecernos varios finales posibles. Tendremos que explorar un enorme castillo buscando las pistas que nos hagan adivinar el nombre de un misterioso duende azul. Secretos, misterio y un toque de terror, redondean un juego que se inclina más por una ambientación y un desarrollo muy medido, en el que la psicología y la apariencia indefensa del niño protagonista prevalecen sobre los gráficos pixelados minimalistas, la banda sonora clásica y las escenas animadas realizadas con gran sensibilidad cinematográfica.
Dependiendo de si ayudamos a este mercader luego nos ofrecerá una recompensa o no
La cosa se está poniendo fea...
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