A pocos kilómetros de Zamora, en la localidad de Roelos de Sayago, hay un lugar donde dos personas luchan contra la mediocridad de lo común y quieren imponer a sus paisanos el buen gusto, la sensibilidad por el arte y demuestran (con creces) que hay otras formas de hacer las cosas.
Este oasis, este tuerto en el país de los ciegos, este reducto de creatividad lo regentan Eva y Jaime.
Jaime es mi primo. Es de esas personas que cuanto más pasan los años te das cuenta de que tienes más cosas en común con él. Antes compartíamos peña de fútbol, donde me ponía enfermo que con su calidad tuviera tan poca mala leche, todo porque yo solo podía presumir de correr "como pollo sin cabeza" ya que de habilidad con el balón siempre anduve justito.
Eva es su pareja, una mujer fenomenal. Hacen un tándem perfecto.
La idea básica de este bar-restaurante-sala de conciertos-sala de exposiciones-centro creativo es que no es obligatorio que por estar ubicado en la Castilla profunda haya que escuchar solo música de charanga y que los propietarios no tienen que ser hombres de mediana edad (habituales de lugares donde se paga por compañía y que lucen orgullosos los bordes del sobaco impregnados de sudor y el palillo de medio lado en la boca).
Estos dos jóvenes (que sobrepasan los 30 años por poco) llevan con esta bendita locura 6 años en la brecha, en la lucha , en el barro, en la gloria...Nunca hay placer sin dolor, espero que se lo hayan tatuado a fuego en la nalga.
Hacen lo que quieren hacer y lo hacen con gusto. Tienen negocio propio y las ideas claras.
Lo particular de este lugar es que se apuesta por la cultura.
Se hace un festival de Rock anual , este año el sábado 13 de Julio. Se lleva la música a la gente. Jazz, rock, swing, pop, folk,poesía, fotografía, pintura...
Tienen en mente ampliar esta oferta en breve. Muchos pensarán que son Quijotes que luchan contra molinos de viento, yo creo que no saben hasta que punto pueden sentirse orgullosos de no ser un número más en un trabajo de cadena, de ser borregos sin sueños. La gente con sensibilidad debe vivir en el alambre, si no es así es que está muerto en vida.
Una cosa quiero aclarar, ellos apuestan por innovar, por ofrecer algo diferente a lo que se propone en muchos kilómetros a la redonda, pero no dejan de lado la buena oferta gastronómica , las cervezas bien tiradas y las partidas de mus donde los fanfarrones son admitidos y aplaudidos.
Bendigo la idea de provocar las mentes y que las hace salirse de la norma y la monotonía.
Este fin de semana, viernes y sábado 12 y 13 de Julio, celebran sus seis años y lo harán a lo grande.
Si podéis ir no lo dudéis ya que os limpiará el alma y os hará evocar entre las encinas escritos que Garcilaso de la Vega nos legó hace tiempo.
Paz, arte, sonrisas...la felicidad no sale tan cara.
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Cartel del Festival de rock obra de Alejandro Antoraz