El guionista de American Beauty insiste que su historia sobre vampiros que aporta "espacios creativos" que no tuvo en anteriores trabajos como A dos metros bajo tierra donde, según confiesa, en la cuarta temporada ya se estaban "dando cabezazos contra la pared" para no repetir historias o situaciones que se vivieron anteriormente en la serie.
Algo que promete no pasará en True Blood ya que toda la parafernalia vampírica y sobrenatural permite un campo de trabajo mucho más amplio. "Podemos seguir con ello mucho tiempo", reitera. Pero eso no significa, puntualiza, que vayan a prolongar la serie indefinidamente, sino que cuando crean que la historia no da más de si y ha llegado el punto de poner el punto y final lo harán.