Tan claro es que la 'Sola Escritura' nunca fue el criterio de fe y autoridad en el Cristianismo primitivo, que la Confesión de Fe Cristiana más antigua y universal (el Credo de Nicea) no dice por ninguna parte "Creemos en la Biblia" (cuyo canon por entonces ni siquiera se había definido), ni menciona siquiera a las Escrituras, sino que confiesa: "Creemos EN LA IGLESIA, que es Una, Santa, Católica y Apostólica", dejando claro que el criterio de autoridad era eclesiástico (todo lo que enseñara la Iglesia -por medio de la Escritura y de la Tradición- en tanto que depositaria de la revelación completa recibida por Cristo y los apóstoles) y no solo escritural.
Alfredo Rdz.