El crimen del centurión. José Enrique Vázquez

Publicado el 06 septiembre 2019 por Fesaro
La satisfacción que proporciona leer autores autopublicados se hace mucho más patente cuando encuentras un libro que te deja buenas sensaciones. Es como si realizáramos un descubrimiento y más sabiendo la cantidad de libros anónimos y casi sin publicidad que podemos encontrarnos hoy en día en las plataformas de la red.
El crimen del centurión ha sido una de mis lecturas veraniegas, una novela no muy extensa pero si intensa donde el thriller y la historia se dan la mano para conseguir una trama que lograr mantener al lector enganchado a la lectura de principio a fin.

Título: El crimen del centurión.
Autor: José Enrique Vázquez.
Editorial: Autopublicado.
Año: 2019.
Género: Thriller histórico. 
Páginas: 219 páginas.
ISBN: 9781097686223.





Sinopsis:

Roma, año 81 d.C. Tito es emperador, y pretende realizar ciertas reformas que perjudicarán a parte de la nobleza. Su hermano Domiciano encabeza la oposición en la sombra. Tres hombres están dispuestos a todo para evitar una conjura que acabe con su vida. Varios crímenes ilustran y sirven de paisaje para relatar cómo los romanos amaban, mataban y morían en esa época.
Impresiones:

Novela que se desarrolla en el año 81 d.c. Roma es un imperio y al frente de él la figura de Tito Flavio Vespasiano (Tito), emperador que intenta llevar a cabo una serie de  reformas que los nobles y aquellos que gozan de poder no terminan de ver con buenos ojos.

Sirva esta situación de base para alimentar la vida de unos personajes que si bien no representaran a figuras históricas  reales salvo la del  propio Tito, que tendrá un papel testimonial,  por el contrario el elenco de participantes en la trama que desfilaran ante nosotros serán lo suficientemente atractivos como para llevar el peso de la novela sin que esta zozobre en ningún momento. Una historia coral llena de personajes que reflejan en muchos casos el modo de vida de los ciudadanos de Roma con sus pocas virtudes y su exceso en el vicio.
Infidelidades, sexo, amor, conspiraciones, intrigas palaciegas y políticas, asesinatos y acción son los ingredientes que en su justa media darán forma a una trama que gracias a sus capítulos cortos se torna ágil, fácil de leer y anima a avanzar en la lectura para ir conociendo las vicisitudes de personajes como Cátulo, centurión romano que vive una vida entregada al ejército y que sufre  los caprichos ambiciosos de una esposa a la que no ama. Nefernefer, criada de Julia Flavia, esposa de Cátulo la cual posee el don de tener visiones que predicen el futuro. Léntulo, jefe de los pretorianos que hace del asesinato un oficio por el cual su espada se alquila a buen precio para sacarse un buen sobresueldo y de paso ayudar a tejer una trama que en las sombras y en relativo secreto conspira contra el emperador.
Seremos testigo de las vidas de estos y otros personajes que se irán añadiendo a la historia a media que avanzan los capítulos, que se irán desarrollando de forma independiente al principio para luego ir estrechando el círculo, para que en el tramo final todos estos sujetos confluyan en el desenlace de la novela.
Una novela sencilla, sin grandes pretensiones salvo la de entretener y hacer de la lectura un medio para disfrutar. No encontraremos entre sus páginas grandes lecciones de historia pero si detalles lo suficientemente bien seleccionados por el autor para sumergirnos con la imaginación, en una historia de ficción los suficientemente creíble para que esta hubiera sucedido en la vida real.
Por el camino cierta licencia a la hora de encajar las piezas, alguna que otra leyenda urbana típicas de las películas de romanos más que de los manuales de historia con las que el autor ha querido dotar de más colorido a su obra para darnos la clave que lo que prima en su creación es más el viaje en sí que el vehículo con el que se realiza el trayecto. A su thriller lleno de conspiraciones, tracciones y giros constantes, su autor, José Enrique Vázquez podemos decir que lo ha disfrazado de romano con cierto éxito para poder situarlo en un escenario del todo atractivo.