Hoy toca publicar una reseña que llevaba tiempo deseando hacer, sobre todo después de la última decepción, porque este libro me ha gustado mucho y quería compartirlo con todos vosotros, aunque dudo que quede alguien que no conozca estos títulos. ¡Vamos con ella!
(Trilogía del ganador #2) Plataforma NeoTapa blandaAño de publicación: 2016Precio: 16.90€
La boda de un miembro la realeza es el sueño muchas chicas. Implica una celebración tras otra: bailes, fuegos artificiales y diversión hasta el amanecer. Pero para Kestrel significa vivir en una jaula en la que ella misma se ha metido.
A medida que se aproxima la fecha de boda, anhela contarle a Arin la verdad sobre su compromiso: que accedió a casarse con el príncipe heredero para que él pudiera ser libre. Pero ¿puede confiar en él? ¿Acaso puede confiar en sí misma?Kestrel está convirtiéndose en una maestra del engaño. Ha empezado a hacer de espía en la corte. Si la descubren, su país la considerará una traidora. Sin embargo, debe encontrar el modo de cambiar su despiadado mundo… y, en el proceso, está a punto de descubrir un espeluznante secreto.
He de reconocer que La maldición del ganador fue mi libro favorito de 2016, me gustó de principio a fin, por lo que estaba deseando devorar esta segunda parte. Mis expectativas estaban por las nubes y me negaba a leerlo sin tiempo para poder disfrutarlo.
Todo esto es traduce en que me había convertido en un lectora difícil, y lo más probable era que me llevara una decepción, pero nada más lejos de la realidad: Marie Rutkoski ha vuelto a cautivarme de principio a fin.
La historia continúa con nuestros protagonistas, Arin y Kestrel, pero esta vez por separado y en escenarios diferentes. Kestrel se enfrenta a las intrigas de la corte, ya que es la prometida del futuro eperador y se espera de ellas grandes cosas. La joven se convertirá en una agente doble que lucha por sus intereses mientras intenta cuidar y mantener a salvo a todos los que quiere, todo ello bajo la atenta mirada del Emperador, que espera cualquier error para destruirla.
Arin, por su parte, vive una difícil situación: por una parte su país está enfermo, al borde de la hambruna y el colapso por falta de sustento. Por otra parte debe enfrentarse a sus sentimientos: el único amor que ha conocido está a punto de casarse con el gran enemigo, dejándole a él atrás. Por si fuera poco, Arin debe llevar a cabo una misión de suma importancia: conseguir aliados de cara a una posible guerra.
Reconozco que la parte que más me ha enganchado es la relacionada con Kestrel, porque constantemente se mantiene al filo de la navaja y eso te hace estar en tensión y desear saber más y más. Me gusta la forma en la que va evolucionando el personaje pero sin perder su esencia inicial, se mantiene coherente en toda la trama y es fiel a sus principios, aunque también se equivoca y se culpa a sí misma por sus errores.
Quizás la parte de Arin es la que menos me esperaba, hay momentos en los que lo veo demasiado vulnerable y que cambia de aires demasiado pronto. Por otra parte las vivencias de este personaje también son peligrosas, pero siento que no tan estresantes como las de ella.
Respecto al romance de nuestros protagonistas me encanta, porque sigue sin ser empalagoso ni ocupar toda la historia, sino que hay elementos (como la política, la traición, alianzas, etc.) que se mantienen igual de importante, evitando que la historia de amor ocupe cada línea aunque sí sea el eje central de la historia.
En lo referente a la narrativa y la edición, encantada y maravillada es poco. La autora sabe llevar muy bien al lector sin darle momentos de respiro ni perder su atención y la edición, cuidada y bonita, hace justicia a la obra.
En definitiva, El crimen del ganador se mantiene a la altura de su predecesor. Son dos obras que sin duda recomiendo y, dado que no he podido esperar, ya estoy con el tercer título: El beso del ganador. Estoy segura de que quienes lo han leído lo habrán disfrutado tanto como yo y a quienes dudáis si darle una oportunidad, mi respuesta es "sí, sin duda".