El cuarto mandamiento

Publicado el 18 mayo 2014 por Lu

A finales del siglo XIX, la mansión Amberson es la más fastuosa de Indianápolis. Cuando su dueña, la bellísima Isabel, es humillada públicamente, aunque de forma involuntaria por su pretendiente Eugene Morgan, lo abandona y se casa con el torpe Wilbur Minafer. Su único hijo, George, crecerá demasiado consentido y malcriado. Años más tarde, Eugene regresa a la ciudad con su hija Lucy, de quien se enamora el engreído George.


Me fascinan las imágenes, esa fuerza del blanco y negro, la cámara, las luces, las sombras, las escaleras, esa casa, esos automóviles primitivos. Grandes actores, grandes escenas. Sentimientos que desbordan amor, celos, posesión, silencios, años de espera, bondad, comprensión, vanidad, madurez.

Lo único que me molesta es la voz en off, que va narrando la historia, y que finalmente, presenta a actores y equipo técnico. La voz de Orson Welles.

He leído que esta película sufrió cortes por parte de la productora, y el montaje no corrió a cargo del director. Aún así, es una maravilla.
Título original The Magnificent Ambersons. Director Orson Welles. Guión Orson Welles (Novela: Booth Tarkington). Música Bernard Herrmann. Fotografía Stanley Cortez (B/N). RepartoTim HoltJoseph CottenDolores CostelloAgnes MooreheadAnne BaxterRichard BennettRay Collins. EE UU 1942, 88 min.