El Cuerpo de Marines de los Estados Unidos vinieron a Israel para entrenar con unidades de élite de las FDI para aprender cómo tener éxito en el desafiante Medio Oriente.
Uno de los oficiales da la orden en Inglés — “¡Cuerpo a tierra!” — y los combatientes inmediatamente se abren paso detrás de la duna con vista a la ciudad, y se apresuran hacia adelante rápidamente en parejas, tratando de crear distancia entre sí y mantenerse ocultos del “enemigo”.
La orden no fue dada en inglés porque sí – los combatientes que planearon entrar a la zona de combate no vestían uniformes de las FDI y para la mayoría era su primera vez en Israel. Estos combatientes son del Cuerpo de Marines, una unidad de combate estadounidense, una de las principales unidades de combate del mundo, que llegó a Israel para entrenar con unidades de élite de las FDI como parte del ejercicio Juniper Cobra 2018.
Esta vez, los Marines se reunieron con la unidad “Egoz” y aprendieron de ellos sus experiencias de combate en el Medio Oriente. “Durante el transcurso del ejercicio, les enseñamos nuestras técnicas de combate: desde técnicas aplicables en campos abiertos hasta aquellas aplicables en ámbitos urbanos”, explicó el Capitán B., un comandante de brigada de la unidad de comando llamada Egoz, “Su llegada a esta región es un evento importante” continuó explicando el Capitán B. “No tienen instalaciones de este tamaño y no tienen el lujo de este nivel de coordinación con una unidad como Egoz, los soldados de combate que tienen una larga experiencia en este ámbito local – es una contribución significativa a su entrenamiento. Ellos absorben la capacidad creativa y única de nuestros combatientes y entienden cómo utilizar estas medidas para conseguir una victoria decisiva”. Uniéndose a las palabras del Capitán B., se encuentra el Capitán Kevin Kaim, un comandante en el Cuerpo de Marines: “Un ejercicio con las unidades de comando israelíes es importante porque nos hace entender las tácticas y técnicas que pueden ser aplicadas en las áreas urbanas. Nos dimos cuenta que dos ejércitos pueden trabajar juntos y general motivación mutua para crear un ejercicio efectivo”.
Call of Duty – la versión real
Después de esperar un largo período de tiempo en varios puestos fuera de la ciudad imaginaria, se escuchan los sonidos de los equipos de comunicación del comandante de los Marines. “¡Vamos!” les dice a sus soldados y en cuestión de segundos un número de soldados avanzan. De repente, el sonido de los disparos se extiende por la zona. Los combatientes entienden que están profundamente dentro de la batalla y de ahora en más hasta que lleguen a la ciudad tendrán que estar alerta para evitar el enemigo, identificarlo y finalmente eliminarlo.
Los disparos aumentan y se acercan pero los combatientes continúan avanzando cubriéndose detrás de sus camaradas, incluyendo los francotiradores y de fondo se escuchan las órdenes de los comandantes americanos: “¡Sigan moviéndose! ¡Ve! Ve! Ve!”
El movimiento de los Marines en el campo, los sonidos de disparos y las órdenes de los comandantes americanos que se escuchan en el área proporcionan una sensación de combate. Cuando te encuentras al lado de los soldados descritos anteriormente, puedes entender que todo lo que has visto en el cine de Hollywood con respecto a los Marines es totalmente preciso y de hecho sucede en el campo.
Una pantalla de humo cae sobre la ciudad
Los soldados entran al primer edificio y se enfrentan al “enemigo”. “¡Fuego!”, ordena el comandante y los soldados responden. Suben las escaleras y examinan dentro de la casa que ahora está bajo el control de los marines. Los comandantes de las fuerzas entran al edificio y planean cómo flanquear al enemigo oculto y extenderse por la ciudad para alcanzar la victoria.
Los comandantes, entre los que se encuentra el Capitán B. aportando a sus contrapartes estadounidenses el conocimiento que ha acumulado a lo largo de su servicio, acordaron colectivamente en su breve discusión sobre un plan para salir de la ciudad. La ruta está cubierta de disparos a sus alrededores, de todas formas, los Marines ya se ocupan de capturar una cantidad de puestos en la entrada de la ciudad y junto con el humo y el soporte de los francotiradores desde lo alto de los edificios, cubren a las fuerzas terrestres lo que les permite continuar y avanzar.
Es importante darse cuenta que a pesar del profesionalismo de las tropas estadounidenses, el “enemigo” que los enfrentó, los combatientes de la unidad Egoz, conocen muy bien las tácticas militares comúnmente utilizadas para sorprender efectivamente a los infantes de marina, de una manera que los prepará adecuadamente para el combate real.
Los disparos se detienen lentamente y los combatientes se acercan con éxito al objetivo que se designó al inicio del ejercicio — un lanzacohetes que deben localizar y destruir. Ahora, después de localizar este objetivo, se puede decir que se logró cumplir la misión. “Fue uno de los ejercicios de entrenamiento más exitosos en los que hemos participado”.
“El ejercicio y la reunión entre las dos unidades permiten la transferencia de información de calidad”, enfatizó el Capitán B., “Estamos aprendiendo de ellos una serie de cosas relacionadas con su estilo de vida militar, que es diferente de la nuestra, y de la misma manera llegan a comprender el enemigo al que nos enfrentamos nosotros, que les permite ver qué pasos debemos tomar en el campo de batalla”.
El Capitán Kame felicita a los soldados que participaron del ejercicio: “Quedamos muy impresionados por los estándares de las unidades israelíes y por su nivel de competencia en el ejercicio a través de los más mínimos detalles, desde las ubicaciones en el terreno, el funcionamiento de los sistemas de armas y hasta el ataque del objetivo”.
“Gracias a este ejercicio, nuestras habilidades mejoraron”, estaba convencido. “Estoy seguro de que la cooperación con las FDI nos ayudará en el futuro. Este ejercicio es uno de los mejores ejercicios que hemos tenido hasta ahora, y me alegraría entrenar nuevamente con el ejército israelí en el futuro.”
Fuente: IDF
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