Ahí estaba él, viendo el partido como un mero espectador más, sin ningún tipo de cara que reflejara nerviosismo hacia el que iba a ser su debut con su nuevo equipo. Sentado en el banquillo, Ravel Morrison esperaba a que su nuevo entrenador le diera entrada de una vez por todas. Quería jugar, quería ganarse la confianza de su nueva afición. El sábado pasado debutaba con el Cardiff en la Sky Bet Championship ante el histórico Sheffield Wednesday. No creo que el partido merezca un artículo, de hecho, no creo que mereciese estás líneas. La historia de Ravel, sí.
Los 21 años de vida de Ravel Morrison son dignos de Telenovela sudamericana. Desde que entró en la academia del Manchester United a los 14 años, el centrocampista inglés ha sufrido lesiones bucales, ha sido acusado de agresiones sexuales, ha sido detenido, llevado a juicio, ha tenido problemas con Ferguson que le llevaron a abandonar Old Trafford y, por último, el idilio que tenía con Allardyce en el West Ham se ha esfumado.
Cuando fichó por los Hammers en Enero de 2012, pensaba que estando en Championship iba a poder disfrutar de más minutos, pero únicamente jugó un partido con los de Londres. En el mercado estival de la 2012/2013 se fue cedido al Birmingham, donde recuperó la confianza. Disputó 23 encuentros y metió 3 goles. Cuando volvió de la cesión en la 2013/2014, Allardyce le incluyó en el once titular hasta en 12 ocasiones -en Premier League-, pero en diciembre, cuando el mercado de fichajes volvía, los rumores de ruptura entre Allardyce y Ravel eran un hecho. La razón era bastante clara: no compartían el mismo agente y Sam intentó convencerle de hacerlo. Él se negó y un mes después volvía a la Championship, esta vez de la mano del Queens Park Rangers de Harry Redknapp.
Hoy en día, Ravel ya no es el tema de conversación en Inglaterra, ni siquiera en el West Ham -aunque él quiera alargar la película publicando tweets en contra de Allardyce y el club-. El pasado mes de Julio fue detenido por una supuesta agresión a dos mujeres. Allardyce no le quiere, y este es el último año de contrato que le queda con los hammers. ¿Volverá a ser el mismo Ravel en Cardiff? ¿Asentará ya la cabeza? Quién sabe...