Hospedaje: La 11. Precio: 10.000 (carpa en el living). Calidad: regular (aunque es el mas barato y manejado por buena gente)
El capitalismo no parece haber arribado, con habilidad lo han sabido esquivar; las casas no son solo casas sino también locales comerciales: ropa, comida o estancos (lugares donde venden de todo un poco). Licoreras sacian la sed de los locales. Ocasionalmente se puede ver un supermercado pero no como los conocemos! Estos son pequeños locales parecido a los estancos pero con la forma de un super con cajeros y publicidades. Hay una plaza en el medio y, claro, una iglesia: la fe llega a los lugares mas recónditos. En frente de la casa de Dios esta la plaza principal donde decenas de hombres y mujeres, jóvenes y pequeños se juntan a charlar a las 4 de la tarde de un jueves opaco, casi lluvioso. Alrededor de la plaza, copada por arboles altos, se encuentran las discotecas, bares y restaurantes. Todo parece girar alrededor de la plaza. Claro, como todos los pueblos al cuadrado. La gente no es como en Buenos Aires, New York, Barcelona y demás grandes metrópolis consideradas un lugar del mundo para conocer; acá la gente se saluda y sonríe, casi constantemente. Estar rodeado por verdes montañas también le da un color y olor distinto. Allá arriba a lo lejos la bruma es encantadora, uno podría sentarse en donde? En la plaza, claro, y quedarse hipnotizado, también, por el accionar de esta gente que decidió vivir tranquila y alejada de donde los rastas llaman Babilonia (grandes ciudades donde en lugar de bruma y rocío, nubes y arboles, hay smog, ruido, insultos, y consumismo insano).
Me dirás que no hay mucho para hacer y me costará negarlo. Igual decidí volver al lugar donde mis amigos colombianos me trajeron en 2007. El Darien donde se encuentra el Lago Calima. Al día siguiente iría a ese lago donde el deporte acuático es la estrella estelar. Muchos de los lugares (y si, también la plaza) me remontaron a aquella época, tenia continuos deja vu`s, pero eran de cosas vividas y no errores de la matrix. Cerraba los ojos (muchos habrán pensado que me iba a desmayar) y volvía al pasado. Uno mismo puede auto inventarse la maquina del tiempo. Todo esto, porque estaba solo y mi mente inventaba cosas para no aburrirse!
Adivina adivinador
Te soy sincero. Si bien todo esto era fascinante (volver a un lugar luego de 5 años) adiviné que no la iba a pasar tan bien. Estaba solo y el hospedaje no era el hostel típico con gente rodando por ahí. Como adivino me moriría de hambre e, incluso, recibiría varias golpizas por mentiroso. Fui a comer a un lugarcito simple que carecía de atractivo y los colombianos allí presentes me ofrecieron toda su amabilidad. Conocí entre otros a, en su momento, campeón del mundo de yo yo Adolfo Serrano que durante 20 años viajó por el mundo patrocinado por la malvada corporación de Coca-Cola. Malvada porque te contaré cual es la maquiavélica campaña de marketing utilizada. El iba a las escuelas, daba demostraciones magníficas de yo yo y tomaba, obligatoriamente, 8 Coca-Colas por dia. Los chicos al ver como su ídolo consumía ese brebaje salvaje y generador de diabetes, querían, naturalmente, imitarlo para ser como el. Hoy, el estimado yoyists, sigue con su adicción a la Coca-Cola. Por otra parte estaba Marlene que fue mi cocinera y confidente durante tres días. El amable Luis con su joven esposa y otros familiares completaban la escena de las personas que todas las tardes me acompañaban.
El lago Calima
Una mansión que me dio la bienvenida
Volviendo al hospedaje pasamos, como para continuar con mi racha de lugares bizarros, por una mansión a la cual pudimos acceder. La dueña, una ganadera, alquila la casa por la módica suma de 650 dolares... Diarios. Y yo que creía que Pinamar era caro. La casa con piscina, Jacuzzi, sauna, pool, juegos de plaza para niños, perros de pedigree, gallinas, teros y cualquier otra cosa lujosa que se te ocurra estaban presentes. La vista al lago era sublime. Creo, con tino, que podría pasar una temporada entre tanto lujo. Como para variar de tanto hostel, no?
Costo entrada: 11500 pesos.
Es un parque con piscinas y toboganes, vista al lago, restaurantes, cancha de voley, fútbol y basket; lugar de recreación para niños, adolescentes y grandes. Fui allí en 2007 y la pasé en grande. En esta ocasión pasé y por ser "escritor" me permitieron pasar gratuitamente.
Es un excelente lugar para pasar el día. Lo recomiendo aunque es cierto que para un viajero de bajo presupuesto, como muchos de nosotros, es caro.
La rumba de la noche a pura salsa
Moraleja: no salir a bailar con una colombiana por múltiples motivos. Primero por la incapacidad que tiene uno para moverse al ritmo de la sensual música colombiana y segundo porque no hay manera de que se cansen.
Una despedida atípica
Alguna vez estuviste en el baño jugando al Angry Birds y el piso e inodoro comenzaron a moverse? Así me despidió el Lago Calima. En Cali, después me enteraría, que apropósito del sismo evacuaron una clinica... Y yo en el baño.