En un artículo hablábamos de si era bueno o no ir a correr antes de ir a trabajar, es ese debate en el que las respuestas que encontramos son realmente curiosas y varían según la actividad que se vaya a llevar a cabo en el día a día.
No es lo mismo el que tiene que pasarse ocho horas en la obra al que está sentado ante un ordenador y por supuesto no será igual correr unos poco kilómetros que hacerse una maratón diaria.
Lo que sí está claro es que esa actividad que realicemos al madrugar puede ser muy beneficiosa para el resto de la jornada, lo notaremos sobre todo si tenemos un trabajo más bien sedentario, porque llegaremos con las pilas cargadas, aunque deberemos vigilar siempre aspectos como la hidratación.
Ese plus de energía y vitalidad nos ayudará a rendir mejor en el trabajo, de hecho si correr es nuestro hobbie favorito y lo practicamos antes del trabajo nos permitirá quitarnos esa pequeña ansiedad que tenemos de que finalice la jornada laboral para ir a trabajar y centrarnos “en cuerpo y alma” en nuestro empleo.
El deporte antes de la jornada laboral
Practicar deporte antes de la jornada laboral es positivo, pero siempre con ciertos matices, no es lo mismo correr maratones que 10 km., actividades como pasear, la marcha, ir en bicicleta, son saludables y están al alcance de todo el mundo.
El deporte en general y correr especialmente te harán ser más productivo en tu trabajo, estarás más despierto y rendirás mejor.
Sobre todo al principio es necesario ser prudente y tomárselo con más calma, probar que tal respondemos, seguramente si no estamos acostumbrados los primeros días podemos ir un poco más cansados, es algo totalmente natural y dependerá de lo que tardemos en adaptarnos a la rutina que nos marquemos, pero una vez superados esos días nos daremos cuenta de que correr a primera hora de la mañana es un plus, siendo además algo que nos permitirá afrontar el resto del día y conciliar trabajo, familia, amigos…