El descenso del Río Sella es una de las actividades de aventuras más populares de Asturias, y no es para menos. Se trata de un recorrido que se suele hacer en canoa o kayak con el que se puede disfrutar de unas impresionantes vistas de este entorno natural único además de pasar un rato muy divertido.
Normalmente el descenso tiene comienzo en la localidad de Arriondas, muy cercana a Cangas de Onís y finaliza en Llordón, un municipio muy próximo a Ribadesella. En el descenso del río se recorren más o menos 13 kilómetros que, normalmente, se suele realizar en unas tres horas y media o cuatro de forma aproximada, aunque el tiempo varía enormemente según las condiciones en las que se haga.
Lo cierto es que es una actividad para todos los públicos, incluso para hacer en familia, ya que el recorrido no presenta prácticamente ningún tipo de dificultad. De hecho, es normal ver a miles de principiantes realizando el descenso del Sella sin la compañía de monitores o guías. De esta manera el descenso puede hacerse por personas de todas las edades a partir de 5 años.
Durante el descenso podremos disfrutar de la esencia de la plena naturaleza, rodeados de aire y arboles. Pero además, se han designado dos apartaderos señalizados en los que los que practiquen el descenso pueden parar a descansar. Estos se encuentran, aproximadamente, a los 7 km de la salida y a los 10 km. No obstante, es cierto que durante el recorrido también hay algunas playas que se forman en la orilla del río, donde se puede parar.
El descenso del Sella
Para realizar el descenso del Sella es aconsejable llevar ropa cómoda, incluso un bañador por debajo del traje de neopreno y también un buen calzado impermeable que pueda mojarse. También es recomendable llevar crema solar y toalla ya que se va a estar expuesto al sol durante bastante tiempo.
Sin duda una experiencia para estar en contacto con la naturaleza que todos deberíamos hacer una vez en la vida.