A raíz de las intensas lluvias en toda Gipuzkoa se han producido muchos deslizamientos de tierras similares al de Leaburu que han afectado a carreteras, caminos, pistas, viviendas, haciendas, etc., estamos por lo tanto ante un problema generalizado, que en Gaztelu ha afectado de una forma concreta e incómoda pero que revela también la dejadez plural de administraciones públicas, provinciales y locales ante un fenómeno de origen y evolución natural que no ha sido nunca tenido en cuenta.
Hoy mismo varios grupos ecologistas ponen en la picota a la Diputación de Bildu, por el abandono total de proyectos que en la oposición apoyaban abiertamente; la respuesta oficial ha sido que ellos trabajan con otros ritmos. Queda claro que es la propia naturaleza la que trabaja a ritmos y tiempos diferentes que los nuestros, y que a nadie le gusta, sobre todo cuando está en el poder de las cosas, que le dejen en evidencia.
Las autoridades provinciales han actuado rápido y diligentemente, con el personal y material necesario para que coches, camiones, autobuses, motos, todoterrenos, furgonetas de reparto, puedan circular sin problemas, y lo puedan también hacer durante los cuatro o cinco meses que durará el arreglo definitivo de los 50 m. de carretera hundida y los 150 m. restantes en peligro de inminente deslizamiento, la construcción de escolleras, accesos a caminos y la nueva carretera.
Un entorno como el del complejo Mahala, con ganadería intensiva, productor primario, con un camino medieval e histórico, con la cercana y olvidada cueva sepulcral de Txispiri, con la reciente instalación de un gaseoducto, con el caudaloso riachuelo Malerreka, con una olvidada mina de yeso, con la carretera de único acceso a Gaztelu, postes de luz, cableado telefónico, con una gran cantera abandonada y completamente degradada, un espacio natural en el que la erosión del terreno es un fenómeno común, debería tener como contraprestación a las subvenciones que seguramente recibe, una forma de Estudio de Impacto Ambiental que llevara un seguimiento multidisciplinar y continuado en el tiempo, estudios que si se exigen para otro tipo de actividades. Es decir I+D+I también en el ámbito rural.
El comentario es general, ahora todo el mundo después de visto..... dice que esas laderas cuando eran hayedos y castañares eran mucho más estables... y el bosque.... abandonado, las entresacas sin retirar, y como nos venga una ola de calor como la del verano de 2003, Gaztelumendi se convertirá en una tea ardiendo imposible de apagar.
Recuperación del bosque autóctono YA, revisión del Plan Forestal vasco, YA, Investigación + Desarrollo + Innovación en el ámbito rural YA, nos va el futuro en ello.