Revista Opinión

El destino lo es todo, incluso para los imbéciles

Publicado el 23 septiembre 2021 por Solitarios Invisibles @belzinvisible

El destino lo es todo, incluso para los imbéciles

El destino lo es todo, incluso para los imbéciles Y ahora fierecillas poco ilustradas y domadas, en el supuesto que así lo sean, antes de continuar una mala noticia que aclarará vuestras dudas sobre uno de los muchos puntos que sirven para desgranar y desvelar una de las incógnitas de esta pandemia criminal y tonta, que no tienen parangón y mucho menos contradicción :

En 1960 trabajaban cinco (5) personas en cualquier ramo de la economía por cada jubilado. Hoy a 24 de Septiembre 2021 son únicamente tres (3), y en el año 2030, concretamente dentro de 9 años, por cada dos (2) "operarios" de lo que sea en activo laboral habrá un (1) jubilado, en teoría con una esperanza de vida superior si no hubiese aparecido el Covid-19, lo que hace que sea imposible dar un soporte si no existen más impuestos o en su defecto se recortan también las pensiones, máxime cuando las rentas satisfechas por el Estado a nivel mundial son mayores y la vitalidad de quienes las perciben representan el doble de tiempo que en 1960. ¿ Entienden mejor lo que sucede ?. Deshechos al río y el exceso sobrante humano cuando la oferta es superior a la demanda, mejor se domina con tranquilizantes, ansiedad y miedo regenerado, para reciclarse si hay esperanza o se prescinde de ellos como mejor proceda o convenga en el nuevo orden mundial que no acepta ser reconocido por los transgresores.

El destino lo es todo, incluso para los imbéciles

Habiendo llegado a la inusitada conclusión de que el denunciar, alertar y hacer llamadas a la reflexión no sirven para llamar la atención y conseguir reacción alguna en todo el amplío perímetro de receptores y el no menos abanico de enemigos que nos contemplaban, que hasta hoy nos atendian, repudiaban y alababan, este blog se da así mismo el carpetazo digital, la espalda virtual, dejando de emitir opiniones, para muchos chorradas, a los que siempre consideramos "hanalfavetos" funcionales, estúpidos ignorantes, que no saben lo que les espera al doblar la próxima esquina en cualquier momento de su vida, que será corta sin duda, pues es y será la misma sombra grotesca y dantesca a su inútil figura, con querer saber menos y entregándose a lo mismo que ellos rechazan, que es un condicionante nada exagerado para decirles abiertamente nosotros, los exasperantes conquistadores de la nada, que hasta aquí sorprendentemente hemos llegado, triunfando a nuestra intelectual medida y siguiendo con nuestro conocimiento que es mucho, eficiente y bravo para enviarles saludos a todos quiénes no nos consideran, peones de farragosa y tímida mirada, de la que omitimos despedirnos en un abrir y cerrar de ojos con la nuestra ciega y perseverante, diciéndoles con una simpática sonrisa hasta nunca, esperando extrañamente vernos por pura casualidad en el pupitre de los aprendices, del que los aludidos jamás tendran plaza, que eso sí es una putada.

destino todo, incluso para imbéciles

Eunucos, salud, fuerza y olvido de nuestros intolerantes adagios, a los que va dirigido este mensaje, que ya es mucho cuando no os merecéis nada, pues como siempre los que no saben dar la cara descubierta ganan su escaramuza, y quienes se retiran lo hacen con la daga en la mano, para evitar cortes innecesarios que no los recordará el destino, que lo es todo son duda.

Y por cierto, en cuanto a nuestra lectura sobre la falsa pandemia que se llevará por delante a muchos de los ya vacunados de una determinada edad longeva y otros con patologías diversas, decir finalmente que es raro que el Covid 19 no se haya llevado al campo santo ni al horno del diablo a ningún político, que también son ciudadanos de carne y hueso, ya sea corrupto, de poco seso u honrado. A ninguno.

Eso quiere decir que hay niveles, incluso para quienes te dicen continuamente y ellos por precaución y autoridad no lo hacen.. "ponte la mascarilla". Y nosotros, desde este aberrante blog les diremos.. "quítate la tuya imbécil".

El destino lo es todo, incluso para los imbéciles


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