Si eres devoto de San Judas Tadeo, está bien, pero nunca olvides que San Judas era devoto de Nuestro Señor Jesucristo; fue siervo y discípulo de Jesús. El centro de nuestra fe siempre debe ser Cristo, y el mejor ejemplo es la imagen de San Judas, ¿ya viste a quien tiene en el centro de su corazón? ¡A JESÚS! En el centro de tu corazón también debe estar Jesús.
No permitas que tu devoción se desvíe, San Judas, como nuestro hermano en Cristo que ya goza de la presencia del Señor en el cielo, puede ayudarnos intercediendo, pero el único Todopoderoso que puede concedernos milagros es Dios.
Los Católicos no somos "sanjudistas", somos CRISTIANOS.