​El día más peligroso de mi vida

Por Iñaki Iñaki Alegria @InyakiAlegria


El día más peligroso de mi vida

“El día más peligroso de mi vida ha sido el mismo que el de mi hijo: el momento de dar a luz. Allí estuvimos al borde de la muerte mi hijo y yo.” Nos comenta Bifitu.
Iñaki Alegría. Fundador de la ONG Alegría Sin Fronteras ( HYPERLINK “http://www.cooperacioambalegria.co” http://www.cooperacioambalegria.co)  Coordinador de proyectos médicos en Meki con la Fundación Pablo Horstmann.( HYPERLINK “http://www.fundacionpablo.org” http://www.fundacionpablo.org
Vengo de un país donde el momento del parto es un instante muy esperado, y en la gran mayoría de veces muy bonito y con un final feliz. Es para muchas madres el día más feliz de su vida. Y así debe serlo.

El mismo instante es muy distinto en otras regiones, como la región rural de Etiopía en la que me encuentro.

Aquí el momento del parto es un momento de tensión, miedo… y demasiadas veces con un final trágico, la muerte de la madre o el hijo recién nacido, o los dos… o nace el niño con vida pero ya condenado a una vida de sufrimiento y corta por la asfixia en el momento de nacer. Y así no debe serlo. Más cuando ahora podemos evitarlo.

Hace años no existían los medios ni el conocimiento para evitar la gran mortalidad materna que se producía en cualquier lugar del mundo, a día de hoy, ha cambiado. Existe el conocimiento, existen los medios para disminuir la mortalidad en el momento de dar a luz, se ha reducido en muchos países, pero persiste demasiado elevada en otros. Esto es intolerable. Inadmisible.

“El día más peligroso de mi vida ha sido el mismo que el de mi hijo: el momento de dar a luz. Allí estuvimos al borde de la muerte mi hijo y yo.” Nos comenta Bifitu.

Demasiadas madres siguen muriendo al dar a luz dejando huérfana a su hija ya desde el primer minuto de vida.

Demasiados niños siguen muriendo al nacer.

Demasiadas muertes evitables.

Demasiado sufrimiento innecesario.

Ahora que existen los medios para evitarlo es intolerable, inadmisible, 

Inhumano…