De tantas veces que he oído el discurso en ocasiones pienso que vivo en un eterno Día de la Marmota, cual Bill Murray en la película "Atrapado en el tiempo". El sábado, el Real Madrid, que como todos sabemos es el equipo de toda persona de bien, se acostaba líder después de ganar al Villareal por 4-2. Al igual que pasó hace unas pocas semanas, volvieron a acostarse líderes, lo cual no pasaba desde que el Special One ganara la Liga de los récords, hace ya nada menos que 60 jornadas. Visto así, tenían motivos para celebrarlo, y seguro que más de uno lo hizo. Es más, estoy seguro de que muchos se acostaron empalmados pensando que, por fin, después de más de una temporada y media, volvían al lugar donde les pertenece por derecho: el liderato de la Liga y el futuro título. Les daba igual que el Barcelona no hubiese jugado todavía. Ya daban por sentado que cascarían y que a partir de ahí solamente podían ir hacia abajo, más teniendo en cuenta que Messi apenas ha marcado un gol en Liga este año.
Pero si el fútbol tiene algo bonito (o todo lo contrario, según se mire) es que nunca sabes lo que puede pasar. En apenas 24 horas, en Madrid pasaron de poco menos que celebrar el futuro título liguero a estar desquiciados por enésima vez, buscando responsabilidades de nuevo en el árbitro. No vi la jugada del gol de Alexis, la cual dicen que fue en fuera de juego, pero que se quejen de esta clase de jugadas cuando no hace tantas jornadas, nadie se quejó cuando el Real Madrid marcó un gol con hasta CUATRO JUGADORES en fuera de juego, me parece como mínimo de una hipocresía elevada al cubo. Como reza el dicho, este es uno de los más claros ejemplos de ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en el propio.
Pero no voy a entrar en el ytumasismo, ya que sería el nunca acabar. Pero ya estoy un tanto cansado de los periodistas que solamente enseñan aquello que quieren enseñar. "Hago un especial del fuera de juego de Alexis, pero de los cuatro del Madrid aquel día ni pío", "Que todo el mundo vea cómo Piqué casi controla con la mano, pero de las manos del Madrid dentro del área no digo nada"... A esto yo no lo llamo informar, sino directamente desinformar, porque dan una visión sesgada de la verdad, y esto podría servir hace cincuenta años, cuando no habían los medios técnicos actuales, pero ahora, cualquier cosa que se diga puede ser refutada en cuestión de minutos gracias a internet.
Pero bueno, solamente decir, en cuanto a esta gente, que se haga lo que yo hago desde hace tiempo, y es no darles más importancia de la que realmente tienen. Si a ellos les hace ilusión pensar que están en lo más alto de la profesión periodística (y es que de verdad se lo creen), pues mejor para ellos. Pero que no nos toquen las pelotas a los demás con sus histerias.