Ahora que todo el mundo habla de los Óscar, les hablará de los Globos de Oro. Ella es así. Quería recomendarles un par de series desde hace tiempo pero para abordar una en concreto se tiene que estar de un estado de ánimo especial: Fuerte. Se trata de la serie “The affair”.
Por otra parte, les recomienda fervientemente “Transparent” –una serie que gira en torno al personaje interpretado por Jeffrey Tambor un hombre que a los 70 decide reunir el valor vivir como la mujer, Maura, que siempre había sido- y el remake de “House of Cards”, el retrato de la ambición más dura y despiadada. La interpretación de Kevin Spacey es de lo mejor que ha visto en la televisión en mucho tiempo. Véanla.
En cambio, “The affair”, a pesar de ser magistral por su planteamiento dual, no puede recomendarla sin reservas. Habla de un choque de trenes. El de un hombre casado con cuatro hijos con una posición envidiable en la ciudad y el de una camarera de playa que no supera la muerte de su único hijo.
Imagen: Showtime
Lo innovador de “The affair” no es el drama en sí descrito una y mil veces: atracción inevitable, sexo con ganas, el amor, la ruptura, la incertidumbre. Es cómo los creadores consiguen que la historia sea creíble puesto que cada capítulo está dividido en dos partes. La versión de él y la de ella. Ambos cuentan cómo arruinaron sus vidas. Y aunque el final es el mismo, los puntos de vista difieren. Supone que para que duela menos.
Ella que, por su carácter, se entusiasma con lo último que entra en su vida vio la serie prácticamente del tirón. Y la recomendaba a todo aquel que quisiera escucharla. Después, reflexionó y le dijo a una de sus mejores amigas que tenía la herida aún humeante que no la viera. Porque en esta vida, si se puede elegir, se queda con no sufrir. Aunque sea en la ficción.