El insomnio crónico suele ser consecuencia del estrés, acontecimientos de la vida traumáticos y malos hábitos en el día a día y la alimentación. Sin embargo, también hay ciertas enfermedades o medicamentos que pueden provocar problemas de insomnio. Sin embargo, Instituto del Sueño apunta al estrés como la principal causa de este trastorno que provoca dificultad para conciliar el sueño o mantenerlo.
A través de múltiples estudios e investigaciones, los especialistas en trastornos del sueño han concluido que el estrés derivado de las preocupaciones familiares, personales y del trabajo pueden provocar dificultad para conciliar el sueño ya que mantienen la mente en actividad constante.
A esto se suman también los malos hábitos de sueño y de alimentación, especialmente por la noche. En muchas ocasiones, no tener un horario regular para dormir o comer en exceso por la noche puede provocar un sueño incómodo. Tampoco ayuda a conciliar el sueño el uso de ordenadores, móviles y televisores.
Otra de las principales causas del insomnio crónico está asociado a ciertas enfermedades o, incluso, al uso de ciertos fármacos o medicamentos que pueden provocar problemas para conciliar el sueño y mantenerlo.
Qué hacer para prevenir el insomnio
En casos en los que se manifiesten síntomas de insomnio, es importante acudir a un especialista que evalúe la situación. Además, hay ciertos hábitos que pueden ayudar a prevenir el insomnio y mejorar el sueño profundo y continuo:
- Acostarse y despertarse siempre a la misma hora, incluso los fines de semana, ayuda a crear una rutina de descanso.
- Realizar actividad física regular promueve el descanso.
- En el caso de tomar medicamentos, revisarlos para conocer si alguno de ellos provoca este trastorno.
- Evitar comidas copiosas antes de irse a la cama.
- Descansar en un lugar y un espacio cómodo que sea capaz de inducir el descanso.
Evitar el consumo de alcohol, café, tabaco y ciertos alimentos que pueden provocar insomnio es esencial así como evitar en la medida de lo posible situaciones de estrés, tensión y ansiedad.
En caso de que el problema no remite, es imprescindible acudir a un equipo especialista para realizar un estudio médico en el que se detecten las causas del problema y determinar el mejor tratamiento para evitar el insomnio.