El exceso de planificación afecta a tu productividad
El otro día estuve tomando un café con una amiga y me comentaba que ella planificaba mucho pero que no avanzaba. Según me lo estaba contando lo veía claro, planificaba demasiado y el exceso de planificación afecta a tu productividad, aunque te parezca raro. Así es, aunque planificar es bueno (que te voy a decir yo), cuando abusamos, las ventajas se convierten en desventajas ya que nos hace perder tiempo y no nos permite avanzar en nuestros objetivos. Tener un número excesivo de planificadores y/o listas de cosas para hacer, te hace perder la capacidad de actuar con flexibilidad. Y la organización debe ser flexible, no rígida. Nos debe permitir poder actuar ante un imprevisto y hoy en día hay muchos imprevistos. Hay que evitar que el exceso de planificación se convierta en una forma solapada de procrastinar: si pasas más tiempo buscando la app perfecta para organizarte, o probando cosas nuevas para organizar tu vida o más tiempo del que necesitarías para realizar las tareas en sí mismas o haciendo listas y más listas… es evidente que el uso que estás haciendo de los recursos es pésimo. ¿Por qué planificamos en exceso? La principal razón para dejarnos llevar por el impulso de planificar más de la cuenta suele ser el miedo e inseguridad. No confías en ti lo suficiente y te procuras algo de seguridad y control así, planificando. Creemos que teniendo todo planificado hasta el más mínimo detalle, lo tendremos todo bajo control pero, desengáñate, tener todo bajo control es imposible!
El miedo al fracaso puede hacer que nos quedemos atorados para siempre en la fase de planificación y no pasemos nunca a la acción. No podemos fracasar en aquello que nunca llegamos a hacer y el acto de continuar planificando nos hace sentir como si estuviéramos haciendo algo; esto es muy habitual en los perfeccionistas. Y luego ya están los apasionados de los materiales de papelería. Esto está bien como hobby, pero no para planificarte ni organizarte. Comprar más agendas o planificadores no te hará más productiva, todo lo contrario. ¿Cuándo saber que estás planificando en exceso? • Cuando no ves más allá del plan que has trazado, no miras al presente que influye en el futuro, donde está tu plan. • Cuando te cierras a otras oportunidades interesantes Y cierras los ojos a cualquier circunstancia que pueda desviarte del camino. • Cuando te pierdes el momento presente, por estar tan centrado en diseñar el futuro ideal. • Cuando tu vida se vuelve más rígida y tu comportamiento, inflexible. Planeas cada detalle para posarte en una falsa sensación de seguridad. Consejos para evitar que el exceso de planificación afecte a tu productividad: 1. Reconoce cuando ya te has preparado lo suficiente.- No significa que te lances a la piscina, pero no es necesario que esté todo planeado al milímetro. Traza tu plan: define algunos objetivos, prioridades y próximas acciones y a por ello!! 2. Deja tiempo libre para los imprevistos.- Un viejo proverbio chino invita a “ser flexible como el bambú que se dobla pero no se parte”. Recuerda que muchas de las mejores cosas de la vida surgen bajo la forma de un problema.
3. Acepta que no puedes controlarlo todo.- Como he dicho antes, en la vida hay muchos imprevistos y hay que aprender a manejarlos. La vida siempre te planteará nuevos desafíos y un plan demasiado rígido podría quedar obsoleto ante el más mínimo cambio. 4. Avanza.- El plan perfecto no existe, a medida que vayas avanzando en tu proyecto podrás seguir planificando los siguientes pasos a dar. El camino no es siempre recto, surgen obstáculos y hay que adaptar nuestro plan. Siempre que estés tentado a planificar en exceso, recuerda la frase de John Lennon: “la vida es eso que sucede mientras hacemos planes”. Y tú, ¿consideras que planificas demasiado y eso te hace perder tiempo y te impide avanzar?