El extraño caso de la mujer que llegó a ser papa

Publicado el 27 junio 2017 por Grupolm
El papado es un título reservado exclusivamente para los hombres.  Aunque en la Iglesia Católica el clero no es algo exclusivamente masculino, el liderazgo de la misma Iglesia sí que lo es, y los que gobiernan la Santa Sede solo pueden ser hombres.  Incluso en la Biblia se han removido los libros que hablaban de discípulos femeninos de Jesús.  

Pero hay una historia que habla sobre algo distinto.  Hay registros de algo extraño en Roma, dos papas que fueron nombrados el mismo día y año.  Un papa que fue apedreado en el 855 después de Cristo y un motín en la ciudad.  Y todo podría haber sido causado por una mujer.  

Juan VIII pudo haber sido una mujer


Juan VIII

Hay dos papas con este título, y eso es extraño.  El primero fue nombrado en el año 855, pero allí termina su historia. Se cuenta que mientras los ciudadanos escoltaban al recién elegido pontífice por la ciudad, Juan VIII se desplomó al suelo dando alaridos.  Pronto fue descubierta la causa, se trataba de una mujer, que estaba a punto de dar a luz, y que se había disfrazado de hombre.  

Un grabado de Juan VIII muestra la posible imágen de una mujer encinta 

La turba enardecida arrastró a la parturienta a las afueras de la ciudad y la apedrearon hasta morir.  Ahora, linchar mujeres embarazadas no es algo de lo que ninguna sede religiosa pueda sentir orgullo, así que en muchos registros borraron los nombres y hechos.  Pero los investigadores han encontrado un relato bastante interesante, que podría probar si en realidad pasó esto.  


Anglicus

Dos misioneros en Alemania tuvieron una hija, Juana, quién a los doce años se enamoró perdidamente de un monje, para poder estar con él, se disfrazó de hombre y se unió al mismo monasterio, haciéndose llamar Juan Anglicus.  Pero fue descubierta y tuvo que escapar, llegó a Italia y siguió disfrazándose de monje y trabajó como maestro.  

Una mujer pudo haber pasado como papa, aunque las pruebas son escuetas

Pero era muy talentosa y los cardenales reconocieron esos dones en el “hermano” Juan Anglicus, y le nombraron Papa. Pero Juana había quedado embarazada de su sirviente personal, y el día de su coronación como Papa tuvo dolores de parto y el resto es historia.  Existe hoy día una estatua que se llama “Papa Juan VIII, una mujer inglesa”, esculpida en el año 856.  ¿Esto prueba la historia? ¿Una mujer llegó a ser Papa? Comenta y comparte. 
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