La arena acumulada en el arrecife hace que la verdadera ola de Pipeline aun no haya aparecido esta temporada
En esta época del año, cuando comienza la temporada de oleaje en el North Shore de Oahu, es habitual que, debido a la acumulación de arena sobre los arrecifes, la ola no tenga esa forma a la que todos estamos habituados a ver. Hasta que los potentes swells no llegan y con su fuerza y poder, limpien el fondo, para que el arrecife forme la famosa ola.
En Pipeline, como en otros spots hay un canal natural que está localizado entre la izquierda de Pipeline y Ehukai. Este canal lo produce la Quebrada Pakulena. Las grandes lluvias a lo largo de los años han cambiado el paisaje y en vez de abrirse camino por Ehukai se desvía por Rockpile a unas cuantas yardas hacia el oeste.Pero hay evidencias de que que el agua proveniente de Pakulena salía al mar por Ehukai a principios de los años setenta.
Otro factor que ha creado el canal es es que las corrientes empujan la arena hacia el mar por dos partes: Pupukea y Rockpile. Durante los grandes swells la arena viaja hacia la izquierda por Pupukea y hacia la derecha por Rockpile creando el canal.Entre los meses de Abril a Septiembre cuando los swells son más pequeños y rompen mucho más cerca de la orilla, toda esta arena se va acumulando y forman un extenso fondo de arena que cubre prácticamente todo el arrecife de Pipeline.
En la cultura Hawaiana, dónde el surf es la medida de un hombre, Pipeline es la medida de un surfer. Para los surfistas cuyas vidas se dedican a surfear Pipeline, la experiencia es tanto espiritual como rutinaria, y hay un elemento ritual en el acto de simplemente remar hasta el pico.
Se necesita tener alguna clase de genealogía aquí para ser considerado una verdadera leyenda del deporte; Lopez, Carroll, Slater o Irons tienen toda la gloria de meterse en las cavernas verdeazuladas de este famoso spot.
Después de años de oír historias, ver películas y mirar fijamente las fotografías, manejas a lo largo de Kam Highway esperas con ansia encontrarte con la bronceada estatua de Gerry Lopez al lado de una brillante cartelera con los nombres de todos los anteriores ganadores del Pipe Master.
Sin embargo, en un día pequeño, podrías pasar e incluso no darte cuenta de que Pipe esta allí. Una cresta indefinible en un una playa que parece normal como cualquier otra. Pero con un swell de 12 pies del oeste, se convierte de repente en un Godzilla líquido sobre el océano. Sentarse en la playa y ver Pipe es una cosa, meterse ya es otra muy diferente.
El arrecife de Pipeline realmente son tres arrecifes uno detrás del otro, mar adentro. El Tercer Arrecife es el papá grande, rompiendo 200 metros mar adentro y sólo cuando el swell es enorme. El Tercer Arrecife refracta las líneas de oleaje y crean el marco de la famosa Tubería en los otros dos arrecifes.
Bruce Irons
El Segundo Arrecife es una cresta hidráulica grande, que empieza a romper a partir de los ocho pies (2 mts). Ahí es cuando Pipeline está en su mejor momento, cuando el segundo arrecife está lo suficientemente bien como para permitirte remar fácilmente y formar luego el infame barril del primer arrecife.
El Pipeline de leyenda está el primer arrecife. Rompiendo simplemente a 50 metros de la orilla, el hueco de izquierda es imprevisible, mortal, poco profundo y francamente glorioso.
Para apreciar el peligro del lugar apropiadamente, solo tienes que ponerte una máscara y aletas en un día plato e inspeccionar el fondo. El arrecife de caliza fosilizado no es una plataforma llana, sino más bien, una serie de cuevas escarpadas y pináculos que se parecen a un escabroso paisaje lunar.
Ahí es cuando te puedes dar cuenta de porqué este lugar se ha llevado más vidas que cualquier otra ola en el mundo. La última fatalidad fué el 3 de diciembre del 2005, cuando el surfer de Tahiti, Malik Joyeux bajó una ola de ocho pies, golpeó el fondo, y nunca mas salió. Su muerte conmocionó a la comunidad surfista de Pipeline, y lo peor es que ese Malik era considerado como uno de los surfers de olas grandes más talentosos del mundo.
Como si la ola no fuera bastante, el elemento humano es a menudo más peligroso que la propia ola. La tubería es el spot más disputado, cruel y regulado en el mundo. Sólo rompiendo durante cinco meses al año, se pueden contar con los dedos de una mano los días clásicos cada temporada.
La población surfista del mundo está dividida en tres categorías: aquéllos que no han surfeado Pipeline nunca, aquéllos que han remado cuando está tres pies y cuentan que han surfeado allí y aquéllos que realmente lo surfean cuando es el verdadero y peligroso Pipeline.