Padres e hijos
Sin duda alguna, las relaciones paterno filiales y la complejidad que entrañan cohesionan la obra de Eastwood. Son muchas y muy variadas las formas en que se manifiestas estos temas, empezando por la pareja que forman los protagonistas de El Aventurero de Medianoche, la cual guarda cierta similitud con la infancia del propio director; además de ser Kyle Eastwood quien interpreta al niño que acompaña al personaje principal.
Más ejemplos de estas intrincadas relaciones podemos encontrarlos en Sin Perdón, pues son sus hijos quienes obligan involuntariamente a Will Munny a volver a las andadas y a forjar un inesperado vínculo con el pistolero inexperto; Un Mundo Perfecto, en la que un niño encuentra un modelo paterno en su secuestrador; los hermanos que descubren a su madre gracias a sus confesiones escritas en Los Puentes de Madison; Poder Absoluto y Deuda de sangre; la trágica pérdida de Mystic River; el triángulo que se forma en Million Dollar Baby entre los personajes de Hilary Swank, Clint Eastwood y la desaparecida hija de éste; la distancia que se interpone entre los dos protagonistas de Cartas desde Iwo Jima y sus hijos; la lucha de una madre por recuperar a su pequeño en El Intercambio; la tolerancia intercultural que aprenden Tao y Walt uno del otro en Gran Torino o el sacrificio de Nelson Mandela en Invictus, quien dejó de lado a su familia con tal de pacificar un país al borde del caos.
Sin descanso
Aunque se despidiera de la interpretación con su papel en Gran Torino (única película en la que muere un personaje interpretado por Eastwood), Clint continúa trabajando como director y productor en Herafter, thriller sobrenatural protagonizado por Matt Damon, y una película acerca de la figura de Edgar J. Hoover y la fundación del F.B.I. con Leonardo DiCaprio en el papel principal.
Último estandarte del cine clásico, Clint Eastwood no sólo se ha convertido en sinónimo de buenas películas, sino de historias humanas.