En Argentina (donde matan a una mujer cada 23 horas) el politólogo Atilio Borón se refirió al crecimiento del movimiento feminista en Latinoamérica y destacó que apareció con una fuerza enorme mientras en paralelo se daba "un debilitamiento político de los partidos, los sindicatos y los movimientos sociales. En el caso argentino, el movimiento de mujeres ha sido la fuerza política más impresionante desde la recuperación de la democracia".
La certeza de que "el feminismo es revolución", dio otra muestra de fuerza incontenible, porque el cuarto paro internacional de mujeres para conmemorar su día produjo una movilización más multitudinaria que todas las multitudes anteriores. “La deuda es con nosotras y con nosotres”, fue el mensaje que llegó con el documento final que se leyó en un escenario montado sobre la vereda del Congreso Nacional, en la calle Entre Ríos, entre Hipólito Yrigoyen y Rivadavia. Trabajadoras, militantes políticas, agrupaciones feministas, mujeres indígenas, gente común, abuelas, madres, adolescentes, niñas. Todas juntas en la calle y al final, bajo la lluvia.
"Eran cientos de miles, en el peor de los casos. Un millón cuanto menos. Los organizadores hablaron de dos millones. Los ecos de la marcha llegaron hasta este lunes, porque hubo represión"Gustavo Veiga
En tanto, en México las mexicanas realizaron un paro nacional de actividades en protesta contra la violencia y la impunidad, y la ausencia de mujeres por la iniciativa #UnDíaSinNosotras se notó en diversos espacios públicos y privados en varias partes del país, principalmente en la Ciudad de México.
De acuerdo con cifras oficiales cada día 10 mujeres son asesinadas en México, el año pasado 3 mil 825 mujeres sufrieron muertes violentas que representan 7 por ciento más que en 2018.
Hoy el feminismo sigue haciendo historia, transversal, conflictivo, a veces contradictorio
Una imagen grita más que mil palabras. #ParoNacionalDeMujeres pic.twitter.com/SlfY4k3L0t— Tiempo Argentino (@tiempoarg) March 9, 2020