Will Pipper vive retirado en su barco amarrado en un puerto de Florida. Todo cambia el día en que su hijo Phillip se va de casa sin decir a dónde va. Will averigua que ha estado chateando con una chica que vive en una zona rural del norte de Inglaterra y va allí en su busca, preocupado cuando recibe una llamada de socorro del chico. Lo que descubre en Inglaterra nunca podrían haberlo imaginado, comienza una lucha entre diversos países por hacerse con ello. Mientras, Will y su familia se encuentran en la línea de fuego y su vida, una vez más, correrá peligro.
Me ha gustado mucho, vale la pena leer los tres libros, el argumento es creíble y resulta una aventura muy entretenida.