Portada de ECC
Las andanzas de La Cosa del Pantano llegan a su ocaso en el tercer y ansiado volumen de ECC. De esta manera se cierra un ciclo perfecto al trabajo realizado por Alan Moore.
La historia continúa donde lo dejase el número dos, con la finalización de la sociedad formada por La cosa, El fantasma Errante y Deadman. Cuando el todopoderoso ser vegetal vuelve a su querido pantano descubre que Abigail ha sido detenida y encarcelada por culpa de la relación que mantienen. Los caminos de la pareja se separan hasta que vuelven a unirse en Gotham City, con el consecuente encuentro con Batman (y todo lo que ello implica). El desenlace de la trama promete altas dosis de parafernalia cósmica.
Rick Veitch, John Totelben y Alfredo Alcalá son los responsables de diseñar ese ambiente sombrío de demonios, almas en pena y seres retorcidos. El ambiente psicodélico llega a su auge hacia el final del volumen, tanto en guion como en dibujo, con la aparición de Metrón. Además ECC se ha encargado de diseñar el mismo formato de sus predecesores, con la intención de respetar a los lectores que seguían la colección con Planeta (debido a la pérdida de los derechos).
En la actualidad La Cosa del Pantano no es lo que era en estos números, ni de cerca. Alan Moore giró tanto la maribela que pronto su personaje trascendió del mundo superheroico para llevarlo a un mundo de reflexión, terror y misterio. Un clásico en la historia de los cómics que marcó el fin de una era.
Nacho Pillonetto
Milano y comiquero.