Don José Pedro Prados "El Fundi": MATADOR DE TOROS
“Se nos va Juan José Prados, el Fundi, arquetipo bizarro de matador de toros, firme antagonista del tomateo con el que tienen secuestrado los toros todas esas terelus que se pirran con los artistas y sus posturitas de nachos duatos. En otra época del toreo, más sana y cruel, hecha para hombres y no para metrosexuales, en los pergaminos este Fundi hubiera sido descrito como torero de culto, entre honores de figura y loas al héroe”.
Del magnífico artículo de Antonio Díaz publicado en su blog “Hasta el rabo todo es toro”
En Málaga, hace ya cuatro o cinco años, no recuerdo bien, en una cena con varios amigos de la Peña de Los Areneros de Madrid repasando el momento por el que atravesaba la Fiesta, departíamos de lo humano y lo divino. En un momento tuve el atrevimiento -en aquel momento era torero maldito en Las Ventas- de decir que me gustaba mucho El Fundi, por su valor, seriedad, por la forma que analizaba a sus toros, como los entendía, como ejecutaba la suerte suprema, por ser no sólo un enorme lidiador de mente preclara, sino también porque conseguía dar pases de calidad a toros imposibles, esos que las "figuras" no quieren ver ni en fotografías. La sorpresa, agradable, es que todos asintieron. No era de extrañar porque se trataba de buenos aficionados, de los que siempre aprende uno.
Hay una tendencia general a llamar “maestro” a cualquier torero, sin ningún merecimiento. El Fundi si lo ha sido, y para ello tuvo que estar opositando a la cátedra de tauromaquia durante sus veinte años de alternativa, en plazas como las de Madrid, Sevilla, Bilbao, Pamplona, Vic-Fezensac, Aignan, Nimes, Arles, etc, con oponentes de ganaderías como las de Miura, Adolfo Martín, Baltasar Ibán, Dolores Aguirre, Victorino Martín, Guardiola, Cebada Gago, Cuadri, José Escolar, que componen una larga lista de ganaderías con las que se las ha tenido que ver José Pedro Prados. Y aprobó con suficiencia, dictando muchas clases magistrales de lo que es la lidia y el toreo ante el toro que no quieren ver las llamadas ” figuras” ni en pintura. Pero su nómina, injustamente, no llegó ni a la tercera parte de la de muchos “mata gatos”. Y lo logró con la solvencia de un maestro del arte de Cúchares, pues como verdadero maestro taurómaco hacía sencillo lo que parecía imposible. Como otro Pedro, de apellido Romero, EL Fundi ha sido un consumado matador de toros, un perfecto profesional y gran persona que elevó la tauromaquia a la dignidad de ejemplar vida.
Hoy nos anuncia su retirada del toreo en activo, lo que sentimos muchos aficionados que creemos que este pedazo de torero todavía puede obsequiarnos muchas tardes con su magisterio. Por supuesto, respetamos su decisión, y le deseamos la mejor de las suertes en el futuro que ahora de abre ante él.
La próxima temporada se nos irá de los ruedos un grandioso torero, de quien mi amigo Agustín Hervás dijo: “Cuando la tauromaquia se enseñe en esas suntuosas y vanguardistas aulas de futuro, nombraremos a Pedro El Fundi, catedrático en técnica y torería del excelso y magno arte de la tauromaquia.”
Con mis mejores deseos para el maestro José Pedro Prados, El Fundi.