No paran de llegarnos las noticias desagradables acerca del futbol español, pero esta vez no sólo vienen dadas desde el interior de nuestra liga sino que ahora le corresponde el turno a Europa, cosa que se veía venir. Como es lógico y normal, en Europa comienzan a preguntarse, al igual que nosotros, el por qué en España siguen existiendo equipos que no son sociedades anónimas como el Real Madrid, Barcelona, Athletic de Bilbao y Osasuna, ya que estos cuatro han incumplido la legislación comunitaria por no transformarse.
En los casos de los tres equipos levantinos, Valencia, Elche y Hércules, el expediente sancionador se refiere a los préstamos y avales que dio la Comunidad Valenciana beneficiándolos ilegalmente.
Bruselas entiende que al tener este régimen Real Madrid, Barcelona, Athletic de Bilbao y Osasuna se benefician de una fiscalidad especial ya que los beneficios generados tienen una tributación especial.
Además, hay un expediente particular contra el Real Madrid por la operación de Valdebebas y otro contra el Athletic por el nuevo San Mamés.
La Comisión Europea comunicó el pasado 18 de diciembre que ha abierto un expediente sancionador a los siete clubes mencionados que forman parte del fútbol español por recibir ayudas ilegales del estado (lo que nos faltaba). Las infracciones son de diferente naturaleza, pero en todos los casos se ha constatado que estos clubes han recibido estas ayudas económicas que distorsionan la competencia.
La Comisión también ha estado analizando presuntas irregularidades en una operación urbanística entre el Real Madrid y el ayuntamiento de la capital. Tras concluir esta investigación el departamento de Competencia concluye que sí ha podido haber una ayuda ilegal en el intercambio de terrenos que se produjo entre ambas partes y que ha derivado en ingresos millonarios para el club. El Ayuntamiento los cedió en 1998 con una valoración de 421.000 euros y posteriormente fueron recomprados por 22,7 millones de euros.
El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, ha dado esta información dos días después de que Bruselas haya hecho pública la decisión. El Gobierno, ha dicho, está ya trabajando para preparar los recursos que pueden alegarse en un plazo de un mes desde la notificación oficial y defender así la legalidad de las relaciones entre el fútbol español y el estado. Bruselas llevaba tiempo recabando información sobre estos casos y ha concluido que hay elementos suficientes para sospechar que estos siete equipos se han beneficiado de ayudas públicas ilegales.
En lo que respecta a los clubes valencianos, Bruselas tiene sospechas de que las ayudas públicas que la Generalitat Valenciana ha concedido al Valencia, Elche y Hércules son ilegales porque les dejan en una situación de ventaja frente a otros competidores. Estos equipos fueron avalados por la administración autonómica cuando solicitaron préstamos por un importe total de 118 millones de euros. Al incurrir en impago, la Generalitat ha tenido que hacerse cargo de la deuda con las entidades bancarias, especialmente con Bankia, lo que en la práctica supone una ayuda pública.
La apertura de expediente también viene motivada por la creencia de que este tipo de instituciones deportivas tienen acceso a desgravaciones de las que no se benefician otros equipos de nuestro fútbol.
Fuentes europeas apuntan que las denuncias que han motivado estas investigaciones proceden “de varios equipos de fútbol europeos, entre ellos el Bayern de Munich”. Aunque no hace falta irse fuera para saber que el fútbol español huele mal.
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