El futuro olvidado de Panamá, o la decadencia de las generaciones desde 1990.

Publicado el 04 febrero 2014 por Diego Diego F Ospina @DiegO_OzpY

¿Cual es la meta en común que une a los panameños en este nuevo siglo?.

La entrega del canal a la república Panamá, consistió en una victoria y una derrota. Un éxito sin duda, viéndolo como la reivindicación de un elemento determinante en la esencia del ser panameño, como lo es el paso interoceánico, este ultimo fue el logro máximo y definitivo de las luchas nacionales. La ultima lucha nacional.

Resulta contradictorio pensar que de aquel logro resultara alguna consecuencia perjudicial, pero sucedió. La generación del 90 nació sin razón y sin causa, solo para continuar la estirpe de la nacionalidad, pero no para aportar. Aparentemente, ya todo esta ganado.
Panamá quería ser país y lo logro. Panamá quiso un canal y lo consiguió, con penas y glorias. Panamá quiso democracia y en apariencia la conquisto. Ahora bien, las generaciones del siglo XXI nacieron sin causa nacional.

En este nuevo siglo, y en una situación que alcanza a las personas nacidas desde 1990 y tal vez antes, es necesario preguntarse ¿que une a los panameños?, ¿que sera de quienes nacieron con todo ganado?, ¿se perderá en el nihilismo esta sociedad sin causa?, en apariencia si.

A principio de siglo la revolución tecnológica inicio un aumento en su capacidad y nivel de desarrollo, la Internet se torno en la principal protagonista y los medios de comunicación se transformaron. Si bien antes, los panameños consumían información de una manera diferente, también existía una causa común en la sociedad, ya sea canal, democracia, o nación. Todas esas luchas se ganaron en un mundo muy diferente al de hoy. Actualmente ya no es la información la que es consumida, ahora es la información quien consume a las personas. La tecnología como recurso es invaluable, pero que no nos convierta en idiotas automatizados, el país no puede dejar que se desperdicien las vidas de las nuevas generaciones, solo por que hoy se vive en aparente calma.
En la Panamá de hoy no existe la causa nacional, no hay un sentido unitario de lo que es ser panameño, y lo mas trajico es que la sociedad panameña, aquel grupo humano que logro recuperar el canal de la mayor potencia mundial, fue cambiada por una sociedad impostora, una comunidad adormecida en las tragedias de la rutina cotidiana. No es que no existan causas por las cuales luchar en la sociedad actual, no se entienda mal la idea de la causa nacional, la inclusión de la mujer, el racismo y la lucha contra la discriminación y los estereotipos de cualquier forma, no constituyen una lucha de la sociedad panameña, sino la campaña de los sectores afectados, la lucha de las minorías y por tanto no de la sociedad en general.
Jóvenes que quieren un Panamá mejor, los hay, conozco muchos, pero aun así son muy pocos en comparación a la totalidad de estas personas, son una excepción a la regla, una singularidad. El problema con las nuevas generaciones es que al estar consumidas por la tecnología, pierden la idea de como aprovecharlas. Si ya una vez un candidato gano las elecciones saltando en camas en los carnavales, no le sorprenda que se repita o empeore, es solo una consecuencia de la incapacidad aparente de la nueva sociedad para analizar críticamente la capacidad de quien le va a gobernar.

¿Como podría olvidarse el futuro, si aun no a sucedido?, pues bien, mire a su alrededor, mire a la gente pegada a las pantallas de los aparatos, y piense que esas personas que solo miran a las pantallas, las mismas que consumen todo tipo de información basura, serán quienes hereden este país, serán quienes decidan su futuro y quienes de una u otra forma moldearan el destino de esta nación, de este pueblo, de esta sociedad sin causa. Ellos son el futuro olvidado.