El gas, una alternativa menos contaminante para nuestra movilidad

Por Ecointeligencia @ecointeligencia

Cuando hablamos del proyecto del e-gas de Audi, supimos que éste eras un gas metano de origen sintético, prácticamente igual que el Gas Natural Comprimido (GNC) que se suministra en algunas gasolineras.

Cada vez es más frecuente que en nuestras ciudades parte de la flota de trasporte urbano se pasen al gas. Dicen que es menos contaminante, en ocasiones consumen menos combustible, y éste es, por el momento, menos caro que las gasolinas y fueles convencionales.

Decimos que es menos contaminante porque la combustión del gas emite aproximadamente la mitad de CO2 que el carbón y un 25% menos que los derivados del petróleo

Nos gustaría centrarnos ahora en mostrar las diferentes formas en las que nos podemos encontrar el gas como combustible de automoción y que normalmente vemos identificadas por sus siglas, lo que a los ciudadanos nos provoca cierta confusión. Vamos a ello:

Gas Natural Comprimido (GNC)

El gas mayoritario es metano (CH4), más ligero que el propano y el butano.

De los 3500 vehículos que circulan en España, dos tercios son autobuses y vehículos de recogida de basuras

España sólo cuenta con 30 estaciones (858 GWh/año) propiedad de Gas Natural – Fenosa, mientras que Italia o Alemania cuentan con un millar aproximadamente.

El ahorro de dinero está entre un 30% con respecto al gasóleo (tomando el precio de 1,37 €/litro) y un 50% respecto a la gasolina (1,54 €/litro)

Gas Natural Licuado (GNL)

Es el mismo producto que el GNC aunque en estado líquido, lo que cambia la forma de repostar.

Confiere mayor autonomía, por lo que es ideal para largas distancias.

El precio es similar al GNC, pero su implantación es minoritaria en España. Gas Natural – Fenosa lidera el proyecto GarNet para crear una red de estaciones.

Gas Licuado de Petróleo (GLP)

Este gas para automoción se compone de propano (C3H8) y butano (C4H10).

Unos 8 millones de vehículos circulan en Europa con este combustible, de los cuales unos 13.000 lo hacen en España y 1.500 son autobuses urbanos.

En España existen unas 180 estaciones de servicio gestionadas por Repsol. Hay planes para abrir unos cien nuevos centros por año hasta 2015.

Se estima que el ahorro es del al menos un 30% respecto a los combustibles convencionales.

Biogás

Es un gas combustible que se genera en medios naturales o en dispositivos específicos, por las reacciones de biodegradación de la materia orgánica, mediante la acción de microorganismos y otros factores y en ausencia de aire, a este proceso se le conoce también como digestión anaerobia. El gas resultante está formado por metano (CH4), dióxido de carbono (CO2), y trazas de otros gases.

Existen dos formas principales de producción de biogás, una es la de captar las emisiones que se dan en los vertederos de residuos sólidos urbanos por medio de pozos de recogida, y la otra por medio de la degradación de la materia orgánica en digestores.

El biogás como biocombustible para la automoción tiene un potencial de reducción de combustibles fósiles de entre un 15 y un 20%

Este gráfico nos puede ayudar a entender el flujo de origen y aplicación:

Sin duda hablar de ecoeficiencia nos puede distraer, como dicen McDnough y Braungart, de los objetivos del diseño sostenible y que es necesario que giren alrededor de la ecoeficacia. Pero, a nuestro entender, en mundo donde las energías de fuentes renovables avanzan a un ritmo más lento del que nos gustaría, se hace necesario emplear pasos intermedios en esta transición de que manera que al menos reduzcamos el ritmo alarmante de contaminación de nuestro Planeta.

¿Crees que lo menos malo puede ser bueno?