El Gilipollas de la Semana – 64

Publicado el 19 febrero 2011 por Cavalleto

Ahora toca echarnos unas risas a costa del nivel de estupidez supina que puede alcanzar el ser humano. Olvídate tú de que si hay crisis, que si el paro crece cada día, que si los políticos son corruptos por naturaleza y que tu vecino es un sinvergüenza que no te deja espacio suficiente en la plaza de parking. Lo que traigo hoy es material de primera calidad, de importación, directo al podio.

La ganadora del prestigioso e internacional galardón al Gilipollas de la Semana viene desde las calles de Mexico DF, presta atención:

Una mexicana se encuentra en el noveno día de huelga de hambre para exigir una invitación a la boda del príncipe Guillermo.

Una mexicana de 19 años cumple hoy nueve días en huelga de hambre frente a la embajada británica en México para reclamar una invitación a la boda real del príncipe Guillermo de Inglaterra, que se celebrará el próximo 29 de abril en la abadía de Westminster (noticia).

A pocos metros de la entrada principal de la embajada, Estíbaliz Chávez, una estudiante de 19 años, tiene montada una tienda de campaña donde duerme y guarda sus pertenencias. Junto a ella coloca a diario un retrato del príncipe y su prometida, Kate Middleton, y una serie de panfletos en los que se pregunta-

¿Me dejarán morir sólo por no darme una invitación a la boda real?

Cuestionada por si, a la vista de la situación de extrema violencia que atraviesa México, no hay motivos más serios e importantes para ponerse en huelga de hambre, sonríe y se limita a responder que “si todos lucharan por sus sueños, el mundo sería mucho mejor. Después de ir a la boda del príncipe Guillermo, podré morirme en paz”, dijo Chávez, que en estos días de protesta ha bajado ya siete kilos de peso.

En otro de los carteles, escrito en inglés, explica que es una joven de pocas posibilidades económicas pero que sus deseos por ir traspasan “todo límite”, por lo que haría todo, “hasta lo imposible”, por acompañar a los príncipes el día de su boda.

Para ella, asistir a un enlace real ha sido el sueño de toda su vida, especialmente de la monarquía inglesa, ya que la admiración que siente por la princesa Diana la lleva desde niña en la sangre. “Mi madre me enseño a quererla desde que tengo uso de razón”, dijo.

Tremendo amigos, tremendo. Quiero pensar que nuestra galardonada es una persona con algún tipo de enfermedad mental y no haré mucha sangre, pero asusta el nivel de fanatismo inconsciente que puede tener la gente.