El gran engaño

Publicado el 01 julio 2010 por Dean
"La democracia es una estafa. Es una palabra inventada para apaciguar a la gente, para conseguir que acepten una determinada institución. Todos a cantar: "Somos libres" En el momento en que escuchemos las palabras: «libertad» y «democracia», debemos tener cuidado,  porque en una nación verdaderamente libre, nadie tiene que decirte que eres libre. "¿ Acaso alguien cree que los que están en el poder defienden los intereses del pueblo?No creo que los pobres puedan elegir a uno de los suyos, así que quienes están arriba, son los ricos, que buscan su beneficio personal y el de sus familias y amigos, todos de las altas esferas, banqueros, empresarios y políticos donde el común denominador es el dinero. Esta sociedad de la abundancia ha favorecido el engaño de la llamda democracia, pero ahora que hay mucha gente con escasos ingresos, puede ser el momento oportuno para la reacción, quizás esas personas que piensan y que están en el anonimato pueden alzar su voz y finalmente ser escuchadas. Ya lo decía Saramago, esta democracia esta secuestrada, amputada, condicionada, las grandes esferas toman las decisiones a espaldas del pueblo, pero puede llegar el tiempo en que los de abajo tengan algo que decir, que se acaben el silencio y el conformismo. Las utopías son reales, porque existen en la mente de personas reales. Los sueños son vida porque los sueñan aquellos que se sienten vivos, que no van por el mundo como muertos vivientes. Posiblemente algunos no alcancemos a ver realizado el sueño de un mundo sin fronteras, sin dinero, sin guerras, sin hambre, sin pobreza, sin religiones, sin políticos, sin banqueros, solamente con gente trabajando de manera sencilla, sin sed de riqueza, sin ambición de poder; pero quizás alcancemos a ver la primera piedra, los cimientos de esa gran obra, la primera luz que conducirá a la muchedumbre a salir de la oscuridad.Muchos elegirán seguir adelante con el capitalismo, pero el capitalismo terminará por consumirlos, porque es insaciable, porque la falsa felicidad que proporciona se convierte en angustia, porque la libertad de la que se ufana son en realidad cadenas, porque la  seguridad que garantiza se transforma en insomnio, porque la indiferencia hacia el desfavorecido termina por convertirse en un vacío infinito que lleva a la locura.