El gran Gatsby - F. Scott Fitzgerald

Publicado el 09 agosto 2016 por Miguelj14


Argumento:
Esta es la historia del millonario hecho a sí mismo, Jay Gatsby, a quien sólo le mueve una obsesión: recuperar un amor de juventud. Pero Daisy es hoy una muchacha que forma parte de una sociedad frívola y aburrida de sí misma, una criatura encantadora y también dañina. Un magnífico retrato de heroicidad en un mundo decadente.
Opinión:
El Gran Gatsby es un libro particular por la forma como está narrado y construido. Y es que el modo en cómo se nos presenta Gatsby es inmejorable. Un personaje que inquieta, seduce y extraña. Es ahí donde reside la maestría de la novela: en tener un protagonista con una personalidad compleja que no acabamos por entender. Los lectores, claro está. Porque los personajes de ese mundo de fiestas y elegancia, parecen saber muy bien quién es Gatsby. Suponen, inventan y crean una idea de alguien que es un enigma; de alguien que, simplemente, buscó con tenacidad conseguir lo que quería. Aunque esto lo llevara al pasado. Esa es la otra cualidad de la novela. Mostrar lo que ocurre con esa sociedad, a partir de la figura de Gatsby. 

F. Scott Fitzgerald


Aunque El Gran Gatsby tiene un inicio lento y aburrido. Más aún si reconocemos este ambiente de fiestas que se relata, ya que esta atmósfera -para un lector del 2016-, se ha visto una y otra vez, ya sea leyendo sobre historia del siglo XX o incluso en películas que retratan ésta época. Habría que aclarar que se puede leer una historia de dichos años y disfrutarla encantado (me viene a la mente las de Wodehouse). 
Pero el "problema" con El Gran Gatsby es la forma cómo se recrean estas fiestas superficiales repletas de personajes de Hollywood y personas de clase alta, con una pretensión que -si la comparo con su equivalente en la sociedad actual-, me parece despreciable. Sin embargo, es justo la construcción de este ambiente psicológico la que permite que arranque la novela y recordemos a Gatsby. La escritura que realiza Francis Scott Fitzgerald –aunque incómoda-, no podía ser de otra forma.
 

El Gran Gatsby es un libro que debe leerse porque refleja un mundo interior y exterior de una persona y un mundo que, por lo regular, resulta difícil de acercarse para su futura comprensión. Además de que ofrece una interesante estructura a lo largo de sus capítulos, la cual da para una reflexión sobre las variantes que podrían existir para escribirse de otra forma. Si bien en mi inmediata –y mediocre- revisión, no veo otra.