Por el momento, el Gran Maestro de MLNR (Gran Logia Nacional de Rumanía) Radu Bălănescu, en su tercer mandato, está suspendido de su cargo. La información llega tras dos semanas desde la consumación de la suspensión.
Las recientes decisiones de Bălănescu han provocado una ola masiva de descontento entre los miembros de la organización. Las acusaciones de la deriva dictatorial que había emprendido, se duplican por serias sospechas de fraude financiero.
Muchas logias en todo el país han protestado por las violaciones de la Constitución y las tradiciones seculares. Las afirmaciones se resumieron en un documento titulado "Memorándum masónico rumano", al que cientos de masones ya se han unido. Utilizando un artículo de la Constitución, que prevé tal situación, se creó una Comisión Especial, una especie de CCR con poderes ejecutivos, que analiza la situación creada, identifica las soluciones correctas a la crisis y las implementa. La comisión, que incluye personalidades prominentes e indiscutibles de la fraternidad, está encabezada por el autor de la Constitución de la Gran Logia de Rumanía.
Apagón informativo
La primera medida tomada después de su establecimiento fue la suspensión del Gran Maestro de su cargo, para detener los abusos e investigarlos. Informado, Radu Bălănescu no solo se niega a reconocer la suspensión, sino que también utiliza todos los medios disponibles para evitar la difusión de información entre los masones, especialmente porque las reacciones internacionales son devastadoras. Cuatro Grandes Logias le escribieron a Balanescu, advirtiéndole que sus acciones fueron irregulares, sin precedentes en siglos de masonería y podrían llevar a la pérdida del reconocimiento de MLNR en todo el mundo. Se trata del reconocimiento de todos los masones rumanos, no solo de Bălănescu, lo que daría a la masonería rumana un estatus norcoreano.
En el actual liderazgo de MLNR, mientras tanto, todo se ha convertido en un secreto de estado y este silencio paranoico conduce a un aumento de chismes y escenarios. Se rumorea cada vez más insistentemente, que el equipo de Bălănescu ya está preparando a su sucesor, mientras aún apoya oficial y fervientemente a su líder.
FUENTE: MEDIAFAX RUMANÍA