En Francia no para de llover en un momento en el que, por sumarse otras desgracias, no resulta el más apropiado para inundaciones: las sucesivas huelgas de los distintos sectores, en protesta por las recientes reformas laborales, tienen al país sumido en un caos que ya se intuye suficiente, como para no precisar El espaldarazo de otros problemas...
En París el Sena no parece querer erigirse en excepción, por lo que puede verse a los transeúntes asomar su curiosidad desde la baranda del Puente de Alma, en un intento de comprobar como al guerrero Zuavo le llega el agua hasta los pies.
Este Puente es uno de los más conocidos de cuantos cruzan el río. Su fama se debe al hecho de que fue precisamente allí, en su paso soterrado, donde tuvo lugar el accidente de tráfico que acabó con la vida de Lady Diana Spencer; pero también al monumento a este soldado de la Guerra de Crimea...Y es que su estatua, que data de 1856, sirve a modo de popular indicador del nivel del agua, así como del grado de peligrosidad de las crecidas: cuando el agua llega a los pies, se corta el tráfico en las carreteras de los alrededores; si alcanza los muslos, el río deja de ser navegable...En 1910 la crecida llegó hasta los hombros, el nivel más alto jamás alcanzado... Desde entonces los parisinos saben muy bien lo que significa que el Zuavo ponga sus barbas a remojar...
EXTRAS DEL POSTEscuchar "Les Ricochets", de BrassensEscuchar "Le Zouave du pont de l'Alma", de Serge ReggianiVer registro de inundacionesMás sobre el puente
Texto extraído de "Les Ricochets", de Georges Brassens:
J'en pleurai pas mal,Le flux lacrymalMe fit la quinzaine.
Au viaduc d'Auteuil
Parait qu'a vue d'oeil
Grossissait la Seine.
Et si, pont d' l'Alma,
J'ai pas noyé ma
Detresse ineffable,
C'est qu' l'eau coulant sous
Les pieds du zouzou
etait imbuvable. {2x}