El Guión En Los Tiempos De Netflix 3 – La Venta

Publicado el 26 septiembre 2018 por Carlosgu82

La venta suele ser el último ítem que se toca en un taller de guión, principalmente porque es lo que sigue a la producción del documento completo. En este caso iremos directo a este recurso ya que nos servirá de fuerte motivación.

Ya tenemos la idea y un arte conceptual, tenemos un resumen con cierto detalle de lo que tiene mayor sentido en nuestra historia. Incluso un somero boceto de personajes, situaciones y lugares. ¿Podemos hablar de venta en este estado? Desde luego, pero sólo a los efectos de lo que significa tener un elemento contundente que le robe a cualquiera la capacidad de creer que NO debe comprar nuestro guión.

La imagen que ilustra esta nota no es antojadiza, corresponde a “The Invasión of the body snatchers” de 1978 dirigida por Philip Kaufman e interpretada por Donald Sutherland, Jeff Goldblum y Leonard Nimoy entre otros. Sucede que la primera imagen que vi de la película no fue en un trailer, sino de pequeño en un documental que se llamó “Terror in the Aisles” que hacía un compilado muy bien estructurado de películas de terror y suspenso de la década del 70 (el cual les recomiendo fervientemente). Creo que no dormí varias noches seguidas al ver la perturbadora imagen del perro que avanzaba a paso firme portando la cabeza de un anciano, pero más allá del terror que me inspiraba la escena no podía dejar de pensar en que debía ver de qué película se trataba con urgencia.

En aquella época y a mi edad no era fácil de obtener esa clase de información, pero de alguna manera logré conseguir el título y luego la forma de ver esa joya cinematográfica que además era una remake que superaba ampliamente a la original.

La anécdota viene a cuento por cómo esa imagen logró “venderme” la película. Con un efecto perturbador, desde ya, pero muy efectivo.

Hoy tenemos una gran saturación de imágenes y contenidos de todas clases que hacen que nuestro cerebro esté bastante acostumbrado a la gama de posibilidades, pero esta imagen y la idea en sí, siguen siendo inquietantes. Lo sería como fotograma de portada de Netflix, ¿les cabe alguna duda?

¿Te crees capaz de diseñar algo que tenga semejante poder de impacto? ¿Crees que una idea escrita y verbalizada en un speech puede ser lo suficientemente contundente como para competir con un mundo de posibilidades?

Mi consejo es que siempre apuestes primero a la construcción de una imagen. Una vez que tengas tu idea, dale color, dale brillo, dale algo para que golpee al cerebro casi sin pasar por los ojos y se grabe a fuego hasta que el interesado, ya no tú sino el productor, no descanse hasta saber qué más se te ha ocurrido para completar ese guión que lo enamoró al primer fotograma.

Que por supuesto, debería ser la portada de la carpeta en la que entregues el material.

Y luego, al terminar con el curso, retomaremos la idea de la venta convencional, claro que sí, pero este es un ingrediente secreto que no debes desaprovechar.