Mi madre llamó al Hechicero,
justo cuando yo nací.
"Quiero que la des tu magia
para ser fuerte en el porvenir".
Y crecí como una hiedra,
anclada en lo profundo del bajío.
Luego vinieron días tenebrosos,
un tiempo oscuro de llanto y rabia.
Pero el conjuro me mantuvo limpia
y permanecí a salvo en el naufragio.
Papa Legba, Maman Briggite, Damballah...
me guardaron por la mano del brujo.
Y cuando el Hechicero agonizabamandó que vinieran por mi."!Eh, niña, tu tienes todo mi don!.La magia te hace libre y poderosa.Usa tu mambo con devoción a los loas,
muestra la gracia de Bondye a los tuyos".
Tengo rico grisgrís para mil sortilegios
y gran veneración por difuntos y ancestros.Doy generosas ofrendas de vida y sangre,brindo ceremonias en honor al Vudú.
Se que el chamán encamina mis pasos,!toca madera, soy la hija del Hechicero!.
Texto original de: Manolo Piñero @ 2013