A finales de 1960, la empresa en aeronáutica Bell, comenzó a diseñar un nuevo helicóptero ligero con motor de doble turbina. Una maqueta del nuevo helicóptero se mostró en enero de 1974 en una convención anual de helicóptero. Después del interés mostrado por las compañías, esta anunció la construcción de cinco prototipos. Fueron los primeros helicópteros comerciales de doble turbina desarrollada en el Estados Unidos.
Estos prototipos adoptaron la designación de la compañía Bell Modelo 222, y se utilizaron para cumplimentar con toda rapidez el desarrollo y el programa de certificación; el certificado FAA en configuracion VFR se obtuvo el 20 de diciembre de 1979. El Modelo 222 se beneficiaba de nuevas características tecnológicas, como el sistema de suspension nodal igual al del Bell Modelo 214ST, un cubo del rotor principal provisto de cojinetes elastoméricos que no precisan lubricación, y un rotor principal construido en acero inoxidable y fibra de vidrio.