La historia de El Héroe Perdido tiene lugar muy poco tiempo después de los eventos de El Último Héroe del Olimpo. El mundo de los dioses y semidioses está en aparente calma luego de la batalla final con Kronos hasta que algo extraño ocurre: Jason y sus amigos se cruzan con criaturas que no deberían haber podido ver y Percy Jackson - el héroe y protagonista de los cinco libros de la saga anterior - desaparece de forma misteriosa.
En primer lugar, fue emocionante volver a encontrarme con personajes que creía haber dejado de lado. Si bien la historia parte de otro lugar y apunta a marcar una separación con la saga anterior a partir de ciertas novedades en la técnica narrativa - la principal, sin duda alguna, es la multiplicidad de los puntos de vista -, varios personajes aparecen nuevamente, se recuerdan eventos de libros anteriores y se hacen menciones a profecías antiguas que recién ahora se comenzarán a cumplir.
El Héroe Perdido, no obstante, busca instalarse como la primera entrega de una saga nueva. Este primer libro se asienta en la separación, en comenzar a introducir una idea novedosa y perturbadora: algo más estuvo dando vueltas, sin que los personajes previos o nosotros mismos lo supiéramos, en el curso de todos los eventos de la saga anterior.
Jason, Piper y Leo representan una nueva generación de semidioses que trae consigo una nueva amenaza y, por consiguiente, nuevas aventuras. Riordan hace un esfuerzo por abrir puertas a nuevos conflictos y desafíos sin perder de vista que todo responde a un orden anterior, estrechamente ligado a los personajes más antiguos.
Quienes disfrutaron la saga de Percy no van a tener problema en reencontrarse en esta. La aventura está siempre al orden del día, los cruces con criaturas divinas son un plato común, y los dioses graciosos y espeluznantes inundan la historia. Riordan mantiene su sagacidad a la hora de escribir diálogos, imprimiendo humor y actualidad a las discusiones de los personajes, quitándoles dramatismo a los enfrentamientos de muerte y vida con chistes casuales. Leo encarna el papel del bromista a la perfección.
Los misterios apenas comienzan a despuntar y la mayoría de las preguntas apenas terminan de escribirse. Fiel a su estilo, Riordan deja al final del libro más incógnitas que las que había al principio e invita a seguir leyendo y a descubrir cómo todo esto tiene relación con Percy y los personajes e historias que ya conocemos. El Héroe Perdido es una cálida bienvenida de regreso al mundo de los semidioses que apenas delinea y anuncia una historia que se desarrollará en los siguientes libros.