13 años tuvieron que pasar para que la editorial lo tradujese al castellano. Siendo una obra que es caracterizada por ser muy juvenil, muy viva, en la que todavía no se empeñaban los autores de dramatizar sus viñetas de tonos oscuros y góticos. La recreación de los personajes, sus paisajes y la forma de relatar el cuento me recuerda en algunos momentos a la adaptación que los estudios Disney hicieron en Blancanieves y los 7 enanitos. Con un Bilbo Bolson personaje que me recuerda mucho a los que solía leer de los cuentos ingleses. Donde el recorrido de sus aventuras no cruzaban las fronteras de el jardín de su casa. Una cara muy redonda, con una barriga bien curtida de cerveza y esa pipa de fumar, la cual bailaban entre sus labios, sin más preocupaciones. En su haber cotidiano. Pero Bilbo Bolson no era un Hobbit más. En un día inesperado para el, se vera metido en el viaje más apasionante y arriesgado de su vida, y eso que a un Hobbit de la Comarca sería un autentico sacrilegio. El solo pensar de dejar sus cultivos y la espesura de la tibia cerveza dentro de sus jarras. Una de las cosas que me han llamado la atencion es la base tan firme que ponen en los personajes de los Trolls. Es decir, en muchos cuentos suelen meter personajes misteriosos que poco o nada tienen que ver entre las distintas aventuras, pero con los Trolls, siempre han llevado una base solida. Los cuales siempre te llevan a muchos cuentos infantiles, donde crees haber visto ese mismo personaje pero en una historia totalmente distinta.
El Hobbit (1989) por Charles Dixon y David Wenzel
Publicado el 11 febrero 2012 por Peter Allman @pedro1213 años tuvieron que pasar para que la editorial lo tradujese al castellano. Siendo una obra que es caracterizada por ser muy juvenil, muy viva, en la que todavía no se empeñaban los autores de dramatizar sus viñetas de tonos oscuros y góticos. La recreación de los personajes, sus paisajes y la forma de relatar el cuento me recuerda en algunos momentos a la adaptación que los estudios Disney hicieron en Blancanieves y los 7 enanitos. Con un Bilbo Bolson personaje que me recuerda mucho a los que solía leer de los cuentos ingleses. Donde el recorrido de sus aventuras no cruzaban las fronteras de el jardín de su casa. Una cara muy redonda, con una barriga bien curtida de cerveza y esa pipa de fumar, la cual bailaban entre sus labios, sin más preocupaciones. En su haber cotidiano. Pero Bilbo Bolson no era un Hobbit más. En un día inesperado para el, se vera metido en el viaje más apasionante y arriesgado de su vida, y eso que a un Hobbit de la Comarca sería un autentico sacrilegio. El solo pensar de dejar sus cultivos y la espesura de la tibia cerveza dentro de sus jarras. Una de las cosas que me han llamado la atencion es la base tan firme que ponen en los personajes de los Trolls. Es decir, en muchos cuentos suelen meter personajes misteriosos que poco o nada tienen que ver entre las distintas aventuras, pero con los Trolls, siempre han llevado una base solida. Los cuales siempre te llevan a muchos cuentos infantiles, donde crees haber visto ese mismo personaje pero en una historia totalmente distinta.