La Unidad, que en la actualidad trata a una treintena de niños de diversas edades y con diferentes trastornos del desarrollo, está atendiendo también a cuatro bebés recién nacidos con parálisis cerebral derivada de su prematuridad o por haber sufrido alguna alteración en su sistema nervioso central. “En estos casos el principal objetivo de la rehabilitación es favorecer el desarrollo evolutivo y ayudar a mejorar la calidad de vida del niño y de sus familias”, explica Lucia Sancho, médico rehabilitadora del Hospital de Manises.
Para ello desde la Unidad se evalúan minuciosamente las características específicas de cada caso y se plantea un tratamiento multidisciplinar. Y es que, entre los síntomas que un bebé puede presentar por una parálisis cerebral, se encuentran, además del déficit sensorio-motor, dificultades en la interacción con el entorno y alteración cognitivas. “Cada niño se valora de manera individualizada, aplicándose un programa completo de terapia en función de sus necesidades. Por ejemplo, es muy común en este tipo de bebés que las alteraciones motoras produzcan problemas de alimentación (por la pérdida del reflejo de succión), de respiración o digestivos, por lo que habrá que programar una rehabilitación más específica”, detalla la doctora Sancho.
Trabajo con el reflejo de succión
El Hospital de Manises es uno de los pocos hospitales públicos de la Comunidad que cuenta con una técnica específica de recuperación del reflejo de succión en bebés, realizada por una logopeda especialmente formada en este campo. “Se trabaja con técnicas de preparación de la musculatura, la sensibilidad y los reflejos, lo que permite recuperar poco a poco el reflejo de succión que durante los primeros meses es involuntario. Para ello se realiza una alimentación que estimule el reflejo, con tomas en menores cantidades y más seguidas”, asegura María Jesús Lluc, logopeda del Hospital de Manises.
Terapias motoras y respiratorias
La Unidad también trabaja con los bebés en su desarrollo motor. Para ello, se realiza una exploración en la que se valora la edad cronológica de desarrollo en la que se encuentra el niño y la existencia de posibles alteraciones. Tal y como explica la doctora Sancho, “se valoran los reflejos, las reacciones, el tono muscular o la postura que deberían ser acordes a su edad, con el objetivo de establecer ejercicios que les permitan alcanzar, en la medida de lo posible, su edad cronológica”.
La Unidad también realiza con estos bebés fisioterapia respiratoria. Estos niños pueden presentar dificultades respiratorias debido a la inmadurez de sus órganos en el caso de que hayan sido prematuros. Para ello, se realizan aceleraciones del flujo espiratorio, corrección postural, reforzamiento muscular, y estimulación del reflejo de tos con el objetivo de facilitar la eliminación de secreciones y mejorar la función respiratoria.
Sobre la Unidad de Neurorrehabilitación Infantil
El Departamento de Salud de Manises cuenta con la primera Unidad de Neurorrehabilitación Infantil especializada en tratamiento de trastornos del desarrollo que se integra en un hospital público valenciano. Dispone de un área de 250 metros cuadrados totalmente reformados en Centro de Especialidades de Mislata, ubicado en el Antiguo Hospital Militar, salas de terapia y juego con equipamiento de última generación, como por ejemplo, una sala de estimulación multisensorial. Las instalaciones también cuentan con una sala de fisioterapia, otra de logopedia, terapia ocupacional, neuropsicología y despachos de atención personalizada a familiares.
En esta unidad especializada se atiende a una treintena de niños. La mayor parte de ellos tienen Trastornos del Espectro Autista TEA (autismo) y TGD (trastornos generalizados del desarrollo) que, en este caso, se sitúan por debajo de los siete años. Los casos de daño cerebral son un menor porcentaje, aunque la atención abarca un periodo más amplio al cubrir de 0 a 18 años
http://laredcomarcal.com/not/9111/el_hospital_de_manises_impulsa_la_rehabilitacion_precoz_en_bebes_con_paralisis_cerebral