A veces uno se tira casi una vida entera escribiendo de aquello que preocupa a la gente de la España rural, a la gente de nuestros pequeños pueblos de la montaña palentina. Y cuando uno echa una mirada al pasado, buscando balances positivos, la desolación es la palabra más suave que se me ocurre en estos momentos para definirlo. Uno se siente defraudado, desmotivado, sin el apoyo de quienes la gestionan y sin la implicación, salvo pequeñas excepciones, de quienes lo padecen. Pero uno sigue aquí a pesar de todo, que eso sí que son ganas de revolver en lo imposible.
Por si esto no fuera suficiente para desengañarnos, parece que hasta la culpa la va a tener el mensajero por recordar aquí una vez tras otra que estamos ya a muchos años de aquellas promesas que se hicieron, y que sin la intención de llevarlas a cabo se siguen haciendo, para ponerle freno a esa tenaza de la despoblación y acercar lo más posible un hospital en condiciones a estos aislados pueblos. Mi amiga Marta Redondo, corresponsal de este diario en Aguilar, volvía a recordar este capítulo hace unos días, donde los responsables de aquella comunidad prometían ampliar los servicios del hospital "Tres Mares" de Reinosa, si se firmaba el convenio entre las dos comunidades.
Uno se va haciendo mayor y se va repitiendo con un soniquete que no me extrañaría que molestase a quienes no se sienten afectados. Van pasando los días y van pasando los gobiernos, que arrastran los mismos vicios y composturas que los que nos dejaron. Y la pelota viene y va de un tejado a otro, de una comunidad a otra, mientras la gente se va muriendo, cuando no de enfermedad, de angustia, de soledad, de pena. Ahora los asuntos se han globalizado y, esa lenta y progresiva desmembración de los núcleos rurales que parecía únicamente nuestra, está devorando a otras comunidades, sin que sirvan los lemas ni las campañas que invitan a vivirlos. ¿Recuerdan la estación invernal de "El Golobar"?¿Recuerdan las promesas que se hicieron de retomar aquello y darlo vida? Pues parece que todo se ha quedado en agua de borrajas. ¿Será el hospital de Reinosa para nosotros otro Golobar más?De la sección "La madeja"