fuente: ciel voilé
Nuestros compañeros de Ciel Voilé de Carpentras (Francia) acaban de publicar estas fotografías.
Desde luego, la maldad humana no tiene límite.
El que crea que esto es inocente, que me lo argumente.
Esto para mí es simple y llanamento una operación más de normalización de la goeingeniería.
¡Menuda pesadilla!