El cúmulo globular Messier 5, mostrado en esta imagen del telescopio espacial Hubble, NASA / ESA, es uno de los más antiguos pertenecientes a la Vía Láctea. La mayoría de sus estrellas se formaron hace más de 12.000 millones de años, pero hay algunos inesperados protagonistas nuevos en la escena, aportando juventud en esta envejecida población.
Las estrellas de este cúmulo globular crecen en la misma guardería estelar y crecen juntos. Las estrellas más masivas envejecen con rapidez, agotando su combustible en menos de un millón de años, y terminando sus vidas en espectaculares explosiones de supernovas. Este proceso debería haber dejado sólo viejas estrellas de baja masa en M5, que, a medida que envejecen, se convierten en gigantes rojas, mientras que las estrellas más viejas se desarrollan en la acumulación horizontal azul de estrellas de la imagen.
Sin embargo, los astrónomos han descubierto muchas estrellas jóvenes, azules en este grupo, escondiéndose entre las estrellas más luminosas antiguas. Los astrónomos creen que estas jóvenes rezagadas, llamadas precisamente “rezagadas azules”, fueron creadas por colisiones estelares o por la transferencia de masa entre estrellas binarias. Estos eventos son fáciles de imaginar en los cúmulos globulares densamente poblados, en los que puede haber millones de estrellas apretadas entre sí.
Messier 5 se encuentra a una distancia de unos 25 000 años luz en la constelación de la Serpiente. Esta imagen fue tomada con la Wide Field Channel del Hubble Advanced Camera for Surveys. La imagen fue creada a partir de imágenes tomadas a través de un filtro azul (F435W, de color azul), un filtro rojo (F625W, de color verde) y un filtro de infrarrojo cercano (F814W, de color rojo). Los tiempos de exposición total por filtro fueron 750 s, 400 y 567 s, respectivamente. El campo de visión es de unos 2,6 minutos de arco de diámetro.
Crédito: ESA/NASA Hubble
Enlace original: Breathing new life into old cluster